Más de 36 toneladas de tapas partieron para el Garrahan

Alegría, solidaridad y compromiso. Bajo esas tres premisas, cientos de voluntarios sin distinción de edad, se reunieron en el Parque La Pedrera para protagonizar el cierre de la campaña de recolección de tapitas destinada al Hospital Pediátrico Garrahan. La delegación puntana logró un nuevo récord al juntar más de 36 toneladas que partieron ayer mismo para Buenos Aires. El objetivo inicial era llegar a las 30.

La concentración fue a las 10 en el sector de los dameros, pero la  tarea de los voluntarios arrancó mucho antes. Para llegar hasta el punto de encuentro, tuvieron que reorganizar y acopiar las tapitas, y subirlas a un camión. Una vez en el parque, se turnaban para bajar las miles de bolsas repletas de plástico y acomodarlas en el lugar.  

Cerca del mediodía, el equipo de La Pedrera y el Programa de Reciclado de la Fundación Garrahan, le dieron una emocionante bienvenida a la gente que llegó para acompañarlos. Muchos de ellos, integrantes del programa en otras provincias del país como Córdoba, Corrientes, San Juan. También se sumaron los peques de la Escuela Rural Nº 234 de Los Cajones, que anualmente aportan su ayuda. El anfitrión y director del parque, Maximiliano Frontera, les agradeció a los solidarios por emprender tan significativa tarea, año tras año. "Les abrimos las puertas y el corazón del parque. Muchas gracias", expresó con lágrimas en los ojos. 

Ivette Campot, referente del programa Reciclado en San Luis, destacó la labor de la ONG "Tapiteros" de Villa Mercedes, que logró juntar más de mil cien bolsas, y le dedicó la jornada a Anada Araujo, una de las fundadoras de la organización y a su hija "Maki", paciente del Garrahan. "Esto lo hacemos por ellas, y por todos los niños que lo necesitan", dijo con la voz entrecortada y destacó: "La respuesta de la provincia ha sido más que increíble". 

Las compañeras de Araujo, María José Gómez, Albertina Rodríguez y Cecilia Quaranta, contaron que en las últimas semanas tuvieron una ardua tarea pero que gracias al apoyo de la comunidad, pudieron lograr su objetivo. "Hace un tiempo nos facilitaron un espacio físico para dividir las tapitas por colores, y luego la gente se fue sumando, tanto para darnos una mano o colaborando con los materiales. Armamos una cadena de trabajo y nos juntamos cada sábado, sin importar las condiciones climáticas. Fue muy movilizador", recordó Albertina. Las integrantes de "Tapiteros" aseguraron que la campaña no tiene fin. "Esto no termina acá. Mañana (por hoy) comenzamos a juntar tapitas de nuevo", sostuvo María José. 

Con la misma emoción y determinación, Patricia Gavilán, coordinadora del programa a nivel nacional, tomó el micrófono e incentivó a la comunidad a "transformar la basura y los residuos en salud". 

"La solidaridad es un acto de amor que cambia al mundo y cambia muchos corazones. Hay que contagiar a los demás. En el país tenemos muchos voluntarios. Solo en Buenos Aires, trabajamos 45 personas que diariamente nos encargamos del reciclado, el acopio y la separación de materiales que, además de tapitas, son latas, llaves, papeles y ahora comenzamos a recolectar radiografías viejas", contó Gavilán y recordó que  lo recaudado se intercambia por dinero que se utiliza para comprar equipamiento para el reconocido hospital pediátrico.

Con el correr de las horas, los tres camiones que partieron a Buenos Aires, fueron llenándose. Para animar la tarde, los chicos de la escuela "Nelson Mandela" de La Punta, y el músico e integrante del programa en Corrientes, Arnaldo Puchetta, se encargaron de darle ánimo al equipo.