La tarjeta verde debutó en las canchas del fútbol infantil

Dentro de las iniciativas que propone e implementa la Liga de Fútbol Villa Mercedes, con la intención de mejorar y hacer este deporte más inclusivo y honesto, el fin de semana los árbitros que dirigen el fútbol infantil salieron a la cancha con la tarjeta verde, que se utilizará de ahora en adelante para reconocer y destacar los buenos valores como la solidaridad, el respeto y la educación de los jugadores, y también de los directores técnicos durante el partido. Su debut generó grandes expectativas en los protagonistas y también en los padres que acompañaron a los pequeños. En el debut, dos jugadores hicieron historia al ser los primeros a los que se los reconoció por haber tenido un buen gesto en el encuentro.

“El fútbol mercedino necesita mucho de este tipo de cosas, para que los jugadores, los técnicos y nosotros logremos terminar con la violencia, el maltrato y las cosas que le hacen mal a este hermoso deporte”, manifestó Gustavo Benavente, papá de un jugador de Jorge Newbery. El hombre aseguró que es la mejor forma de motivar a los chicos. “Ellos se van a sentir muy contentos, el cambio va a ser súper positivo”, remarcó.

En esta primera jornada los árbitros premiaron la buena acción de dos jugadores, en diferentes partidos. Los destacados se ganaron además los aplausos de todos los que estaban presentes en el predio de la liga, incluso hasta de sus compañeros del equipo contrario. “Esto va a servir para que en el futuro haya otro estilo de juego y podamos compararnos con el nivel europeo, en este tipo de aspectos”, expresó Walter Chirino, director técnico de La Ribera.

El nuevo sistema se utilizará para más de tres mil jugadores, entre las diez categorías del fútbol infantil, desde la 2003 a la 2012, y la Quinta División, que pertenece al infantojuvenil. A su vez, las autoridades determinaron que próximamente lo implementarán en el fútbol femenino y en las mayores. Además, evalúan otorgarle un premio al final del campeonato al equipo que tuvo el mejor comportamiento. “Distinguir a los equipos va a ayudar mucho a que los padres también seamos parte y colaboremos con el respeto y las buenas acciones afuera de la cancha”, aclaró Lucas Soria, papá de un jugador de La Ribera.

Sin conocer muchos detalles sobre la tercera tarjeta, los niños salían a la cancha con la certeza de que solo podían llegar a recibir una sanción. “No sabía que significaba, pero está muy bueno que también nos hagan saber cuando hacemos cosas buenas en el partido”, comentó Tobías Aguilera, jugador de La Ribera. Su compañero, Ignacio Juárez, aportó su conformidad y agregó: “A veces los encuentros son muy duros, nos pegamos mucho, y con este premio seguro que vamos a cambiar”.

Vanesa Coria, árbitro de las categorías más pequeñas, confesó que a esta nueva iniciativa la tomó como un salto de calidad para el fútbol local. “Implementar esto en los más chiquitos me parece una buena idea, ya que ellos tienen actitudes muy bonitas y es bueno que las podamos destacar para que crezcan en este ambiente siendo buenas personas”, expresó.
 

Los primeros que la recibieron 
El merecedor de la primera tarjeta verde fue Juan Pablo Pedernera, que juega en la categoría 2004 de La Ribera. El deportista hizo historia al ser el primero de los dos que reconocieron y destacaron por tener un buen gesto durante el partido.

“Juampy”, como lo llaman sus compañeros del equipo, recibió el premio por ser solidario con un rival. La Ribera estaba perdiendo 3 a 2 cuando el propio Juan Pablo atacaba por la izquierda, en busca del empate. Al mirar a la derecha, vio que un jugador del equipo contrario estaba adolorido en el suelo y tomó la decisión de tirar la pelota afuera para detener la jugada y que puedan asistir al lesionado. Walter Banegas, el árbitro del encuentro, antes de retomar el juego le mostró la verde y se ganó los aplausos de todos. “Me hizo sentir muy feliz ganarme este premio, pero me da más tranquilidad haber colaborado con mi compañero”, expresó el acreedor de la tarjeta, quien reconoció y agradeció a su familia por haberle enseñado a ser buena persona. “Espero que todos entiendan que el fútbol no es una rivalidad, sino un juego y que lo más lindo es divertirse”, expresó.

Rubén Pedernera y Cecilia Travero, padres de Juan Pablo, expresaron su emoción y el orgullo que sintieron por el premio. "Hay que destacar este logro porque en estos momentos futbolísticos que estamos viviendo, es importante llevarse bien con los rivales", expresó el papá.
El segundo en recibir la tarjeta fue Ignacio Giménez. Juega en la categoría 2012 de Sociedad Italiana y obtuvo el premio por haber sido buen compañero durante todo el partido, muy solidario y siempre atento para colaborar.

La referí Vanesa Coria decidió destacarlo adelante de su familia y con mucha emoción se llevó la tarjeta a su casa.