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Cirugías para la obesidad: en el Hospital evalúan a 30 pacientes

Los especialistas estiman que entre un 80% y un 90% se someterá a la intervención.

Por redacción
| 19 de octubre de 2019
El equipo del Hospital San Luis que trabaja en el programa incluye cirujanos, nutricionistas, psicólogos y médicos clínicos. Foto: El Diario

La cirugía bariátrica (una serie de tratamientos y técnicas quirúrgicas para tratar a personas con obesidad) se instaló con fuerza en el Hospital San Luis. A poco más de un mes de su comienzo, ya son 30 los pacientes puntanos que aguardan la evaluación final que determinará si ingresan o no al programa. Igual, los especialistas estiman que entre un 80 y un 90 por ciento de ellos, accederá y se someterá a la cirugía (bypass gástrico o manga gástrica), mientras que el resto seguirá un tratamiento sin operación.

 

En la mañana del 9 de septiembre pasado llegaron las primeras personas con obesidad al Hospital para realizar una consulta inicial. Esa semana se atendieron seis en total. Las expectativas fueron en aumento. Al día de hoy son 30 los pacientes y ya casi no hay turnos para noviembre y diciembre.

 

"Hacemos un balance más que positivo. Cuando empezamos el programa sabíamos que iba a despertar interés porque no había cobertura de ningún tipo para este tipo de pacientes y terminó siendo así. Por la respuesta que notamos en ellos, creo que esto superó nuestras expectativas. Los veo con muchas ganas, con mucho entusiasmo, pensando a futuro, en cumplir todos los pasos para poder llegar a la cirugía", indicó Raúl Coria, cirujano del Hospital San Luis.

 

Él es solo una parte del gran equipo interdisciplinario que armó el Hospital para dedicarse al flamante plan. Además de Coria, hay un segundo cirujano, cuatro nutricionistas, cuatro médicos clínicos y dos psicólogos. Estas son las cuatro especialidades base del programa que, conforme avancen los tratamientos, se expandirá a otras áreas como diagnóstico por imágenes, endocrinología, gastroenterología, enfermería, kinesiología, cirugía plástica, instrumentación quirúrgica y laboratorio, entre otras.

 

Tras la consulta inicial, en la que el paciente ve a profesionales de esas cuatro especialidades fundamentales, se le solicita una batería de estudios de distinto tipo, para conocer a fondo a la persona y en base a eso determinar si puede o no acceder a la cirugía bariátrica, un programa sin costo para el paciente.

 

"Ya comenzamos la evaluación y el lunes tomaremos una decisión para los seis pacientes que vimos en la primera semana, considerando quienes tienen un criterio de inclusión y quienes no. De los 30 pacientes que atendimos en el primer mes, calculamos que entre un 80 y un 90 por ciento va a ingresar al programa", afirmó el cirujano.

 

Luego continuó: "Entrar implica que los pacientes a partir de noviembre, van a venir todos los meses a consultas con nutricionistas, psicólogos, cirujanos, el médico clínico, endocrinólogo y otros especialistas. Debe cumplir objetivos que se le van a plantear para que dentro del tiempo necesario, la persona con obesidad esté en condiciones para la cirugía. El que hace lo que tiene que hacer, no falta y cumple con esas metas, llegará. El que no, obviamente no estará".

 

Aquellos pacientes que formen parte de ese 10 o 20 por ciento que no ingresa, no es que quedarán sin cobertura para su obesidad. Ellos continuarán con un tratamiento que incluirá las mismas especialidades, con la diferencia que no se someterán a una intervención.

 

"Pasan a un programa de tratamientos no quirúrgicos que también tiene el sistema de salud de la provincia. Ya sabemos de algunos que tienen ciertos antecedentes o contraindicaciones que no les va a permitir ingresar al programa. Por ejemplo, puede pasar que un paciente tenga alergia a la anestesia, por lo que no se podrá operar", manifestó Coria.

 

Cuando empezó la iniciativa se daban cinco turnos por semana, pero a poco tiempo de su comienzo, ya lo ampliaron a seis. Aseguraron que con esto quieren garantizar la atención a los pacientes del interior, que surge de la derivación de los centros de atención primaria de la salud (CAPS). Recomiendan que los potenciales ingresantes al programa consulten primero en el CAPS de su localidad, donde los verá un profesional que determinará si debe ser derivado o no. Coria precisó que si bien la mayoría son de San Luis y Villa Mercedes, también hay de localidades del resto de la provincia como Nueva Galia y Concarán, entre otros.
 

 

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