Villa Mercedes: por la crisis, más familias eligen cultivar sus propios alimentos

Lo que generan las huertas contribuye con una alimentación saludable y sobre todo resultan ser un recurso importante para que en un hogar puedan hacer una diferencia económica a la hora de comprar los insumos para la comida diaria. Así lo ven las familias villamercedinas, que este año cada vez son más las que mostraron su interés por aprender y transformar su patio en una fuente de alimentos. Aseguran que de esta forma le dan un respiro al bolsillo cuando van a la verdulería a comprar para hacer la comida. Los responsables del programa municipal Huertas Familiares aseguraron que el año pasado cultivaron en 52 viviendas, mientras que en lo que va de 2019 sumaron 4 más y tienen cerca de 50 solicitudes en proceso.

Desde hace un tiempo la Municipalidad lleva adelante el Programa Huertas Familiares, que además de regalarles las semillas de diferentes especies como perejil, albahaca, zanahoria, acelga, remolacha, lechuga, pimientos y tomates, colabora con el armado y el sembrado. Al principio comenzó a abastecer a comedores comunitarios e instituciones educativas, con el fin de generar un aprendizaje. Tiempo después, ante la falta de empleo y el constante crecimiento inflacionario, algunos alumnos empezaron a llevarse esos alimentos a sus casas. A raíz de eso, en setiembre del año pasado el proyecto se extendió y llegó a dar vuelta la tierra en pequeños espacios de más de cincuenta viviendas, y hoy la demanda para obtener su propia quinta es mayor.

“En el momento que decidimos tomar esta iniciativa fue por dos motivos fundamentales, el médico nos recomendó que nuestro hijo consuma más verduras, y por otro lado fue la situación económica que nos golpeaba cada vez que íbamos al supermercado a comprar dos o tres cosas para la comida del día”, relató Yanina Gatica, que hace pocas semanas comenzó a practicar en el fondo de su vivienda del barrio Las Miranda, con la esperanza de que en poco tiempo puedan consumir sus productos.

La mujer contó que además de ser un buen recurso alimenticio, la creación de la huerta les sirvió para mantener más ordenado el patio, ya que al ser tan grande les costaba conservar la prolijidad. A su vez, mientras observaba los plantines que estaban creciendo, imaginó el momento de que llegara la primera cosecha. “Estamos súper contentos y cada vez más convencidos de que optamos por una buena idea.

En unas semanas, en vez de ir a la verdulería vamos a salir al patio y volver con una planta de lechuga o algunos tomates”, señaló muy emocionada.
Carina Videla, responsable del programa, destacó la necesidad de la gente por sumar su huerta y aseguró que la mayoría fueron solicitadas ante la situación económica que se está viviendo en todo el país. “Las secretarías de Familia y Promoción Social y Acción Comunitaria recibieron varios pedidos, esto se debe a la crisis que están atravesando en los hogares y por eso apuestan a esta estrategia económica”, explicó.

La encargada contó que desde las primeras huertas que hicieron, no dejaron de asistir a los vecinos y realizaron varias visitas de mantenimiento. “Nos encontramos con muchas que están en un excelente estado, que ya cosecharon varias veces, y otras que lamentablemente tuvimos que volver a sembrar, pero esto es normal porque la mayoría de las familias que solicita este programa no sabe cómo es el proceso, entonces de a poco van aprendiendo y se motivan más”, comentó.

Verónica Abdón, una vecina del barrio 250 Viviendas, que también se sumó este año a la creación de este nuevo recurso, contó que fue para aliviar el bolsillo y tener una mejor alimentación, y está satisfecha porque los resultados se están dando rápidamente. “Al principio no sabíamos cómo íbamos a hacer, lo nuestro solamente era ir y comprar, pero ahora estamos re- contentos lo que están brotando y es algo muy sencillo y fácil de mantener”, confesó. Su marido, Mauricio Ertivo, adelantó que ya están planificando para ampliar el espacio y sembrar otras semillas. “Queremos sumar zapallos calabazas y zapallitos verdes”, remarcó.

Una nueva alternativa

El programa, además, lleva adelante una extensa huerta en el Vivero Municipal. El objetivo es cultivar para obtener plantines, y de esta manera acelerar el proceso que se desarrolla en las viviendas.

"Así vamos a llevar a las casas el proyecto más acelerado para que en poco tiempo empiecen a cosechar los frutos. Otro de los beneficios es que vamos a poder cumplir más rápido con las familias que solicitaron su huerta", explicó Videla.