Brasil derrotó 3 a 1 a Perú y se consagró campeón

Brasil derrotó a Perú 3 a 1 en la final de la Copa América de fútbol que se disputó en un estadio 'Maracaná' de Río de Janeiro repleto de hinchas.

Everton, Gabriel Jesús y Richarlison, este último de penal, marcaron los goles del elenco campeón, mientras que Paolo Guerrero marcó el tanto del descuento para los 'Incas', también con un disparo desde los 12 pasos. 

El certamen, cargado de polémicas por los malos arbitrajes y la pésima utilización del VAR, quedó en manos del anfitrión, que logró así su novena corona continental. Perú quedó a las puertas de su tercera corona, pero cumplió un digno papel a lo largo del torneo de la mano de una generación de futbolistas que renovaron la ilusión de los hinchas y de la mano de un enorme entrenador como Ricardo Gareca. 

Tras un inicio a pura emoción, el elenco dirigido por 'Tite' comenzó a manejar la pelota ante un Perú retrasado en el campo a la espera de una contra. Sin embargo, el dominio del local fue notorio porque hizo vertical a su ataque y movió la pelota con sus volantes.

Cuando el reloj marcaba los 15 minutos, una gran jugada por la derecha del ataque brasileño permitió que Gabriel Jesús -recibió muy cómodo el balón- se quitara dos oponentes de encima y sacara un buen centro para Everton para que definiera al gol sin marcas en el segundo palo. Gallese que nada pudo hacer.

Pero de a poco, Brasil mermó el ritmo, los 'Incas' se adelantaron en el campo y tras un desborde por derecha, un centro rasante del ataque peruano hizo que la pelota diera en la mano de Casemiro y el árbitro chileno Roberto Tobar sancionó penal cuando iban 43 minutos de la etapa inicial.

Aunque luego lo consultó en los monitores del VAR, el disparo desde los 12 pasos no se modificó y Paolo Guerrero canjeó la pena por gol. 1 a 1.

Sin embargo, la alegría no duró mucho para los peruanos porque a los 47 minutos, cuando ya se iban al descanso, Yotún perdió una pelota insólita en el mediocampo, Arthur manejó el balón y cedió para Gabriel Jesús que definió en gran forma para el 2-1 parcial.

En el segundo tiempo, los dos equipos salieron a buscar el área rival. Brasil buscó liquidar el partido aprovechando los espacios que dejó Perú, que intentó con más insistencia el empate, aunque no encontró los caminos óptimos para doblegar a la última línea 'Auriverde'.

La expulsión por doble amarilla de Gabriel Jesús abrió las chances 'Incas', que fueron en busca del empate con decisión ante un Brasil que se resguardó en su campo. Pero, una vez más como ocurrió a lo largo de todo el torneo, un error arbitral generó polémicas, incidió en el resultado y en esta ocasión perjudicó a Perú: el juez chileno Roberto Tobar vio una falta inexistente dentro del área en perjuicio de Everton y sancionó penal.

A pesar de mirar otra vez la jugada en las pantallas del VAR, reafirmó su erróneo fallo y así, desde los 12 pasos, Richarlison puso el 3-1 final y sentenció la historia.   

Los hinchas brasileños por fin se tranquilizaron y dieron rienda suelta a su alegría a puro festejo con banderas de su país y camisetas de su selección. Los fanáticos peruanos aplaudieron a sus jugadores que jugaron una final aceptable, digna y cerraron un torneo que les permite soñar con futuras alegrías.