Su hermano murió tras accidentarse en moto y ahora busca testigos para esclarecer el hecho

El 1º de septiembre Raúl Oscar Moreno se había reunido con sus dos hermanos en la casa de uno de ellos para ver el superclásico River-Boca que se disputaba esa tarde, sin imaginar que sería la última vez que estarían los tres juntos. Cuando regresaba a su casa en moto, Raúl sufrió un accidente cerca del puente Derivador, y casi 24 horas después murió en el Hospital San Luis. Ahora, sus familiares buscan testigos para saber cómo fue el hecho. La Policía les dijo que él “derrapó solo”, pero ellos tienen dudas.

Según contó Alejandro Moreno, hermano de la víctima, Raúl iba a su domicilio, en el barrio Libertad, en una Brava Altino 150 gris y negra. Según informó la Policía aquel día, cerca de las 20:45, el hombre “perdió el control de la moto en el viaducto del Portezuelo, en la colectora noreste, pasando el ingreso al supermercado Walmart e impactó con un poste de luminaria”. Pero Alejandro estima que el hecho ocurrió cerca de las 19:50.

Tras el impacto, el motociclista fue trasladado al Hospital San Luis por una ambulancia del Sempro y quedó internado en el shockroom. “Estuvo en coma desde que entró hasta que murió, al otro día, cerca de las 21. Tenía fracturado el fémur derecho y el tórax. También tenía lesiones en el pulmón derecho y el hígado fuera de lugar”, precisó su hermano.

La víctima tenía cinco hijos, uno en San Luis y cuatro en Santiago del Estero, su provincia natal. Se dedicaba a la albañilería e iba a cumplir 51 años tres días después del accidente.

Su familia busca desesperadamente testigos que puedan aportar datos certeros para establecer qué fue lo que provocó que colisionara.

“La Policía nos dijo que él derrapó solo y que al casco lo llevaba puesto y abrochado. Queremos saber cómo sucedió, si algún vehículo lo tocó o le pasó por encima, si se desvaneció, si hubo un tercero involucrado”, explicó Alejandro. Para cualquier información el hombre puso a disposición su celular: 2664-986526.

“La Policía también nos dijo que cerca del lugar del accidente hay dos cámaras, de las cuales una no funcionaba y la otra estaba tapada por la vegetación. Resta chequear las del supermercado Walmart. Con mi abogado tratamos de ver si nos las pueden aportar para ver si han registrado algo”, señaló.

En cuanto a la moto, que había sido secuestrada tras el accidente, contó que la semana pasada la Policía se la entregó y que cuando la vieron sus inquietudes sobre el hecho se acrecentaron. “Solo se le rompió el espejo izquierdo, la patita y el foco de adelante”, detalló. Considera que las graves lesiones que su hermano sufrió no guardan relación con los daños que presenta el rodado.