Enviaron a Chubut al hombre buscado por matar a una anciana

En el transcurso del día, Mauricio Ezequiel Ramírez estará de regreso en el lugar del que huyó a principios de año. En Chubut. Ayer, al caer la noche, una comisión policial lo trasladó desde Villa Mercedes hasta Trelew. El hombre había estado unos días en San Luis, no de vacaciones como pensaron los familiares que tiene en la ciudad de la Calle Angosta, sino para ocultarse de la Justicia, que lo buscaba por matar a una jubilada en un asalto en Puerto Madryn.

En Chubut, seguramente se reunirá, una vez que la Justicia lo procese por el asesinato de Beryl Williams, con los otros tres acusados que tiene la causa. A saber, Rodrigo Ramón, de 24 años; su hermano Leandro Ramón, de 22; y Manuel Adrián Colón, de 36. Los tres fueron detenidos el 3 de enero y están con prisión preventiva por "homicidio en ocasión de robo".

Ramírez, de 34 años, fue capturado el jueves de la semana pasada. Los policías del Departamento de Investigaciones (DDI) de Villa Mercedes lo buscaban desde hacía tres días, cuando recibieron el pedido de colaboración con la notificación que había una orden de captura en contra del hombre, de parte de la jueza Patricia Reyes, de Trelew, explicó la oficial principal Silvana Morán, jefa de Investigaciones.

Los efectivos locales también fueron informados de que el prófugo manejaba un Volkswagen Bora blanco que, como particularidad, tenía un espejo retrovisor plateado y manijas y llantas negras. El auto era el que, según las averiguaciones hechas en Chubut, habían usado los delincuentes para consumar el robo.

Morán contó que el jueves 23, a las 2:50, cuando recorrían las calles con el Comando Radioeléctrico, avistaron un coche similar al del prófugo y el conductor, al advertir la patrulla, reaccionó con nerviosismo. "Quiso doblar en una calle, volvió y retomó otra arteria", recordó Morán. Fue en Amaro Galán y La Rioja.

Cuando el automovilista miró hacia el móvil, la oficial principal lo reconoció por las fotos que le habían pasado. "Entonces él frenó de golpe, hizo marcha atrás rápidamente y se inició la persecución", relató la jefa policial.

En un momento lo perdieron de vista, pero, tras un operativo cerrojo y la ayuda de algunos vecinos, lograron establecer que el vehículo había entrado en San Luis 727, en lo de los tíos de Ramírez.

El sospechoso supo que la Policía lo había descubierto. Fue al fondo, se cambió de ropa, cargó una mochila con sus pertenencias y trató de huir por los techos de las casas vecinas. Pero los efectivos tenían la manzana vigilada y lo apresaron.

El homicidio por el que lo buscaban sucedió entre la noche del domingo 29 de diciembre del año pasado y el lunes 30.

Los asaltantes amordazaron a la jubilada de 86 años, la ataron de pies y manos y la golpearon. Le robaron dólares, joyas de oro y celulares. El cuerpo de Beryl fue hallado horas después por su hija. Había muerto asfixiada por el amordazamiento.