Un psiquiatra concluyó que Ariel Rosendo simula

El personal de la Clínica del Aconcagua que atiende al senador Ariel Rosendo aún no ha dado una estimación de cuándo el legislador podría recibir el alta, para que se pueda cumplir la orden de detención y sea enviado al Penal, por robo, incumplimiento de una orden judicial y violación de la cuarentena. El director de ese centro de salud, Rodolfo Negri, le planteó al juez Leandro Estrada que el alta de la institución no solo depende de cómo está su organismo, sino también de cómo se encuentra en el plano mental. Por eso, el magistrado envió a un psiquiatra del Poder Judicial para que hiciera una valoración del representante del Departamento Pedernera, quien actualmente está suspendido. El perito de la Justicia concluyó que durante el interrogatorio que intentó mantener con él, Rosendo simuló estar inconsciente. 

El viernes, la médica forense Sandra Miatello, a quien el juez le había encomendado una nueva constatación del estado clínico del senador, le remitió al magistrado su informe.  En ese segundo reporte que hizo la especialista (al primero lo había hecho el jueves), indicó que Rosendo presentaba "buen estado general", que había tenido una buena evolución y que los estudios que le practicaron durante la internación dieron resultados normales.

Por eso Miatello consideró que el senador provincial está "en condiciones de recibir el alta institucional", dado que "no presenta ningún criterio médico que lo obligue a permanecer internado".

Ante esa valoración de Miatello, Estrada le solicitó al médico que atiende al legislador que le informe la fecha en la que podría recibir el alta. La consulta del juez fue contestada por Negri.

Según una fuente de la causa, Negri le respondió que el alta médica no es algo que depende únicamente del estado del organismo del paciente, sino también de su salud mental. Le remarcaba eso porque se indicó que el legislador aparentemente tenía ataques de pánico y padecía el encierro.

El sábado, entonces, además de ordenarle a la forense que verificara por tercera vez el estado clínico de Rosendo, Estrada envió al psiquiatra judicial de turno, Martín Cippitelli, para que hiciera una valoración. El profesional cumplió con la medida la noche del sábado.

Según trascendió, Cippitelli le informó al juez que Rosendo no prestó colaboración cuando quiso entrevistarlo. Ni siquiera abrió los ojos cuando llegó el perito. Dio cuenta de signos compatibles con la simulación de un estado de inconsciencia.

El psiquiatra también indicó que, de acuerdo a la historia clínica, el legislador no tiene antecedentes de patologías de salud mental y tampoco ha sido medicado para enfermedades o trastornos de ese tipo. Lo único que le han suministrado es un ansiolítico de baja dosis.