Los productores están guardando los terneros

El productor ganadero argentino se refugia en la retención de su hacienda como protección de su capital en medio de la incertidumbre económica provocada por la pandemia de coronavirus. Sobre todo, están guardando sus terneros hasta que aclare un poco la situación y se estabilicen los precios.

Esa fue una de las conclusiones del Mercado Ganadero Rosgan en su evaluación semanal del sector, al señalar que "el productor ganadero siempre fue proclive a refugiarse en la hacienda. Sabe, por experiencia, que la ganadería le ofrece una protección segura para sus pesos sin perder liquidez, dado que se trata de un mercado que siempre está dispuesto a comprar".

Además, consignó que "hoy estamos viendo un productor ganadero que, mirando más allá del corto plazo, sale a reposicionarse en kilos de carne, tratando de protegerse del escenario actual, de cara al mediano y largo plazo. Es así que los valores para la cría y la invernada se mantienen firmes. Si analizamos los precios, tanto de terneros como de vientres, vemos una interesante recomposición en términos relativos", añadieron los autores del reporte.

Según los especialistas del Rosgan, en lo que va de abril los valores concertados de hacienda promedian "entre 60% y 70% por encima de los registros de abril 2019, contra una inflación interanual que en el mes de marzo se ubicaba en 46,9%".

"Si bien es una realidad que este año la zafra de terneros se está desarrollando con cierta demora debido a las complicaciones logísticas originadas a partir de las medidas de la cuarentena nacional, lo cierto es que en muchos casos es el mismo criador quien está demorando la salida de sus terneros rumbo a los feedlots", expresaron.

Según la evaluación, ante la incertidumbre reinante el criador está reteniendo más, "no quiere desprenderse de los terneros, dado que tras la venta no encuentra alternativas confiables para la colocación de los pesos. Por eso prefiere quedarse en un activo seguro, que conoce, con el que sabe trabajar y posponer la decisión de venta al menos por unos meses, hasta tanto el panorama resulte más claro", manifestaron.

De acuerdo con Rosgan, esta misma visión también la tiene el recriador y de allí la puja por hacerse de la invernada para comenzar a llenar los campos.

Por otra parte la retención de hacienda es posible dada la condición en la que se encuentran hoy los campos, con un comienzo del otoño relativamente lluvioso y con temperaturas aún levemente por encima de lo normal, lo que provoca que haya una muy buena oferta forrajera, que permite mantener buenos niveles de carga animal por hectárea.