No declaró una pareja detenida por abusar de su hija en Quines

G. sufrió en silencio casi toda su vida. Durante siete años habría sido sistemáticamente abusada por su padre biológico. Producto de esos constantes ultrajes quedó embarazada de quien hoy es su hija, pero a la vez también sería su hermana. La semana pasada, harta de todo lo que ha tenido que sobrellevar en su corta pero dura vida, denunció ante la Justicia que había sido violada por su padre cuando vivían bajo el mismo techo, en Quines. Por eso la jueza de Instrucción Penal 3 de San Luis, Virginia Palacios, ordenó la detención no solo del hombre, sino también de la madre de la joven, por haber callado todo lo que hacía su pareja. Este sábado los indagó por los abusos, pero ninguno de los dos declaró.

El hombre de 60 años está imputado por "Abuso sexual con acceso carnal agravado por causar un daño en la salud, por el vínculo y por tratarse de una víctima menor, aprovechando la convivencia preexistente, con corrupción doblemente agravado por tratarse de una menor y por el vínculo", y la mujer, de 41 años, fue imputada por el mismo delito, pero en calidad de "Partícipe necesaria en comisión por omisión, atendiendo a su posición de garante".

Asistidos por el defensor oficial Carlos Salazar, ambos se abstuvieron de declarar y solicitaron ocho días de prórroga del arresto. Lo que significa que la jueza tiene plazo hasta el próximo domingo para resolver si los procesa por los delitos por los que los investiga. Mientras tanto, uno permanecerá alojado en la Comisaría 2ª y el otro en la Comisaría 3ª.

G. ahora tiene 20 años. Hace apenas seis días se animó a contar ante la Justicia lo que padeció desde que tenía 6 años hasta los 13, reveló una fuente allegada a la investigación. Esa edad, los 13, terminó de marcarla: fue cuando dio a luz a su hija.

Luego sus padres se separaron y ella continuó viviendo con su madre. Pero hace seis meses "la mujer, por una situación de violencia, abandonó la casa", confió el informante. Desde entonces la víctima vivía allí con su hija y sus dos hermanas. Puesto que, por disposición de un Juzgado de Familia, G. "quedó a cargo de esa propiedad y de la tenencia de sus hermanas".

La pareja fue detenida el viernes. El personal de la Unidad Regional 1 había viajado a Quines la noche anterior. Tenían la orden de detener e inspeccionar minuciosamente los domicilios de los padres de la víctima.

Alrededor de las 14, con la colaboración de sus pares de la Seccional Distrito 15° y de Canaf (Comisaría de Atención a la Niñez, Adolescencia y Familia), allanaron la vivienda del hombre, en Granadero Figueroa. Allí secuestraron "teléfonos, dispositivos de almacenamiento y documentos" que tendrían relación con los abusos y arrestaron al sospechoso.

A las 17 fueron hasta lo de la madre de la joven, en el barrio Banda Este. Al igual que en la vivienda del otro imputado, en su domicilio incautaron otros elementos relacionados a los ultrajes.