Hundidos en la música y en el calor psicodélico, Los Espíritus pasaron por San Luis
La banda de La Paternal regresó a la provincia más acelerada y con la reinvención como guía espiritual.
Los vaivenes internos que cambiaron la historia y la formación de Los Espíritus parecen haber quedado atrás. La banda —asidua visitante a la provincia— encontró en el quinteto un formato que aumentó su reconocida exploración sonora y que los condujo a un estilo, aunque no enteramente propio, compacto, sólido y bien ejecutado.
El regreso de Maximiliano Prietto a la formación, lo que derivó en la ida de Santiago Moraes y Francisco Paz, fundadores del grupo, fue una declaración de principios ética (a su manera) y estética que todavía genera polémica en el indefinido ambiente del rock nacional respecto a la perspectiva de género.
Más allá de esa disquisición, Los Espíritus se consolidó en su espíritu y en esta etapa busca recuperar el tiempo perdido. La demostración de eso fue “Sancocho stereo”, el disco que editaron en 2021 y que estuvo conformado por dos partes, en el que una de ellas tuvo artistas nacionales reconocidos como invitados y del que presentaron, en parte, el jueves en un bar del centro de San Luis.
En medio de un calor agobiante y húmedo acrecentado por el baile incansable de los seguidores puntanos, el grupo repasó el álbum nuevo e hizo visitas a toda su discografía con especial atención en el exitoso “Agua ardiente”, del que sonaron “Huracanes”, “Jugo” y “La rueda que mueve al mundo”.
Para demostrar que la visita puntana era eminentemente revisionista, también recuperaron viejas canciones de sus discos primigenios como “Lo echaron del bar” y “Noches de verano”, el tema que cierra su álbum debut y que se escuchó sobre el final del encuentro puntano.
Aunque algunas cosas cambiaron en la banda y su reinvención, las camisas floridas y la preocupación por la psicodelia, el blues rockeado y el respeto a los orígenes más duros del rock argentino (en el último disco hay un homenaje a Vox Dei detrás de su versión de “Jeremías, pies de plomo”) siguen siendo el horizonte espiritual de la formación.
Las modificaciones se evidenciaron, en el plano musical, en una extensión de los pasajes instrumentales, notablemente acelerados respecto a presentaciones anteriores.
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