Terminó la cosecha de maíz en San Luis con el peor rinde en 12 años

La sequía y las heladas tempranas no perdonaron al maíz en San Luis. Finalizada la cosecha en toda la provincia, el rendimiento promedio fue de 37,9 quintales por hectárea, el peor número obtenido en los últimos doce años.

A esta enorme pérdida se le sumó la disminución en cantidad de hectáreas completas, en total fueron 37.180, que se restaron de un total sembrado de 354 mil hectáreas, según el último reporte de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).

La mayor merma de superficie sembrada con maíz en San Luis se ubica en el centro del Valle del Conlara, la zona donde más pegó la helada del 18 de febrero.

Un estudio de la Sociedad Rural del Valle del Conlara estimó que las pérdidas económicas allí, sumando todos los cultivos, promediaron 20 millones de dólares.

El listado de rendimientos promedio de maíz en San Luis en los últimos doce años fueron los siguientes:

2022: 352.000 ha, 62,3 qq.

2021: 311.500 ha, 70,3 qq.

2020: 317.900 ha, 60,8 qq.

2019: 140.600 ha, 62,6 qq.

2018: 230.000 ha, 50,8 qq.

2017: 215.000 ha, 75,6 qq.

2016: 155.000 ha, 74,1 qq.

2015: 116.000 ha, 70,6 qq.

2014: 126.000 ha, 64 qq.

2013: 131.000 ha, 51,3 qq.

2012: 100.000 ha, 44, 5 qq.

2011: 87.000 ha, 56 qq.

Mientras tanto, en los campos agrícolas de San Luis continúan los preparativos para largar con la siembra de girasol.

Los pronósticos inestables y los costos de siembra serían parte de los motivos por los cuales en la provincia las estimaciones para el girasol cayeron en 7 mil hectáreas respecto de la campaña anterior.

Según las primeras proyecciones de la BCBA, en la provincia se sembrarán en esta campaña 76 mil hectáreas, siete mil menos que el año pasado.

Para la entidad, el girasol en San Luis pegó un salto en la campaña 2022-2023. De 42 mil hectáreas pasó a cubrir una superficie de 82  mil.

A pesar de la falta de humedad en el estrato superficial, productores debaten la posibilidad de extender la ventana de siembra hasta mediados del mes de septiembre a la espera de lluvias, para incorporar la mayor cantidad posible de hectáreas.

Las lluvias que cayeron en los últimos siete días aportaron un volumen variable de milímetros sobre el área agrícola nacional.

El grueso de las precipitaciones se concentró sobre el sur y el este, mejorando notablemente las reservas del perfil.