Los últimos incendios provocaron daños de una magnitud histórica

El impacto de los últimos incendios en la provincia es brutal. La Unidad de Emergencias y Alerta Temprana de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) elaboró un informe que señala que el fuego consumió un total de 45.466 hectáreas. A esta cifra, se deben agregar algunos focos menores que se dieron en la zona serrana. Extraoficialmente, las hectáreas afectadas por el fuego rondarían las 50 mil. Se trata de hechos de magnitud histórica.
El territorio puntano es afectado constantemente por los incendios forestales. Hay determinados factores que hacen que el fuego se propague con fuerza y dañe grandes zonas y generen pérdidas económicas y de biodiversidad. En los últimos años, San Luis encabeza las provincias argentinas con mayor cantidad de hectáreas afectadas de acuerdo a los datos publicados por el Sistema Integrado de Información Ambiental, elaborado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible a fines del 2023. El documento indica que en el año 2022, se vieron afectadas 135.748 hectáreas, mientras que en el 2023, las hectáreas afectadas sumaron 129.186.
Si bien no se ha informado precisamente sobre la destrucción de viviendas, los incendios llegaron a amenazar áreas residenciales en algunas zonas rurales. En varias ocasiones fue necesario evacuar personas y proteger casas e instalaciones de infraestructura básica.
Muchos habitantes de las zonas rurales perdieron sus hogares y pertenencias, lo que conlleva altos costos en la reconstrucción y en el restablecimiento de sus vidas cotidianas. El humo y las cenizas afectaron la calidad del aire, incrementando problemas respiratorios entre los habitantes.
Por otra parte, los focos ígneos destruyeron áreas naturales y reservas, lo que derivó en una valoración negativa que afectó la actividad turística.
La devastación de casi 50 mil hectáreas provocó la pérdida de flora y fauna autóctonas, lo cual afecta negativamente la economía local relacionada con el turismo y los recursos naturales a largo plazo.

Un proyecto para declarar la emergencia
Sobre el final de la sesión del 1 de octubre de la Cámara de Diputados de la Nación, aprobaron un emplazamiento a comisiones para tratar un proyecto de ley de declaración de emergencia ambiental, económica y habitacional en zonas afectadas por los incendios en la provincia de San Luis. Los autores de la iniciativa son Ernesto “Pipi” Ali y Natalia Zabala Chacur, diputados de Unión por la Patria. Todos los bloques estuvieron de acuerdo en darle un despacho, es decir, está listo para que en una de las sesiones se pueda tratar.
“Tiene connotaciones en lo que tiene que ver con la ayuda inmediata, y el proyecto plantea algún tipo de diferimiento y exención. Si no declaramos la emergencia es muy complicado”, apuntó Ali durante la sesión.
“Esto está sucediendo ahora, es inmediato; no tenemos mucho tiempo para darle una mano a todas las personas que perdieron su vivienda. Los animales necesitan hoy comer y tomar agua, y esto es un tema urgente en cuanto a las necesidades”, subrayó y advirtió que el futuro no es nada alentador, ya que en la zona calculando los últimos 12 años, el promedio de precipitaciones es de entre 900 y 950 milímetros anuales, y al día de la fecha los datos arrojan los 300 milímetros.
“Una vez que entró el fuego a la sierra, o lo dejás ir o corren peligro de vida las personas que están combatiendo el fuego”, aportó Zabala Chacur. Contó que hay personas mordidas por víboras, o chanchos jabalíes, que escapan de las llamas. “Todo esto es biodiversidad”, sintetizó.
Desde la oficina de Unión por la Patria, informaron que el proyecto va apuntado a declarar la emergencia. La letra original la estipulaba por 180 días, pero se hicieron un par de modificaciones y pusieron 90 días con posibilidad de extensión a otros periodos según lo que suceda. Por ejemplo, si no se pudieran recuperar las pérdidas se extiende a 90 días más.
El espíritu del proyecto contempla una serie de exenciones impositivas, condonaciones de intereses, la posibilidad de acceder a algunos créditos a tasa subsidiada para reponer tanto lo comercial como las viviendas. Otra cuestión tiene relación con emplazar al Ejecutivo nacional –y por ende al provincial- a estar atento a las necesidades que tengan los productores y las personas que fueron afectadas.

Los daños en los últimos incendios
De acuerdo a un informe elaborado por la oficina de Unión por la Patria, este año el sector más afectado fue el Departamento San Martín. Según los datos elaborados por Bomberos Voluntarios, los parajes y localidades más comprometidos fueron Las Lagunas, Potrerillo, Paso Grande, Villa de Praga, Los Manantiales, Casa de Piedra, La Ramada, La Vertiente, Guanaco Pampa, Guzmán, San Isidro y La Cocha.
A estas localidades se debe sumar Bagual, San Luis capital -sobre la ruta 3 y avenida Serranías Puntanas-, El Volcán, Merlo y Concarán. Los focos ígneos no solo devastaron extensiones de vegetación, también pusieron en riesgo viviendas y obligaron a realizar evacuaciones en algunas zonas. Un ejemplo tiene que ver con la localidad de Balcarce, donde las llamas afectaron a tres viviendas y se tuvo que concretar la evacuación de varios vecinos.
El impacto de los últimos sucesos es significativo y afectó a los sectores agrícolas, ganaderos y al turismo, con graves consecuencias para la población local. Aún no hay informes oficiales, pero los primeros indicadores arrojan que se vieron dañados grandes extensiones de pastizales, campos cultivables.
La información recabada por la oficina de Unión por la Patria, advierte que esto genera un aumento en los costos de producción debido a la necesidad de importar forrajes o de recuperar tierra dañada. Del mismo modo, las instalaciones rurales, como alambrados, caminos y redes de riego, sufrieron daños considerables. Además, el daño a la infraestructura afecta la capacidad de transporte y acceso a las áreas de producción.

Redacción.