Se agudiza la interna en el gobierno provincial

Terrazas de Portezuelo se ha convertido en algo así como un hervidero. Los rumores van y vienen. Están a la orden del día y el malhumor que refleja el gobernador Claudio Poggi es una muestra acabada de lo que está sucediendo.

Todo indica que hay una fuerte interna entre el ministro de Hacienda e Infraestructura Pública Néstor Ordoñez y el vicegobernador Ricardo Endeiza. Como consecuencia de los tirones, que habrían incluido duros cruces verbales, Ordoñez que a su vez está a cargo del Ministerio de Ciencia e Innovación, ha amenazado con presentar la renuncia.

El motivo es que Ordoñez se habría cansado de las actitudes del vicegobernador “que permanentemente se quiere meter en todos los temas del Ejecutivo y en particular en Hacienda”, donde se manejan todos los fondos públicos, los destinos que se dan, el manejo del personal y las diferentes contrataciones.

“Como Endeiza de manera sostenida quiere intervenir y ejercer influencia en las acciones de Hacienda es que se ha generado el enfrentamiento”, confió una fuente gubernamental.

Pero la novedad del miércoles al trascender el culebrón que no ha sido desmentido, indica que Endeiza no es el único motivo del enojo del ministro de Hacienda e Infraestructura Pública. Otra fuente que se contactó con este medio, apuntó que el tercer protagonista de esta pulseada es la secretaria general de la Gobernación, Romina Carbonell.

De acuerdo a las versiones, la exsecretaria privada de Claudio Poggi, en sus cortos e inconclusos periodos como diputado y senador nacional, tiene serias diferencias con Ordoñez por sus manejos al frente de la estratégica cartera de Hacienda e Infraestructura Pública.

Estos chispazos, más los que mantiene con el vicegobernador Ricardo Endeiza, estarían empujando a Ordoñez a evaluar con suma seriedad su continuidad en el Gobierno.

Algunas cuestiones personales que debe atender Ordoñez alentarían el paso al costado que estaría por dar. “Néstor es uno de los colaboradores de máxima confianza de Claudio (Poggi), vean la foto de la última reunión de gabinete donde estuvo sentado a su derecha junto a Romina Carbonell, por eso es muy difícil que se vaya”, manifestó otro observador de los movimientos en el gabinete.

Pero como dice el refrán: “Cuando el río suena, piedras trae…”.

Terrazas de Portezuelo se ha convertido en algo así como un hervidero. Los rumores van y vienen. Están a la orden del día y el malhumor que refleja el gobernador Claudio Poggi es una muestra acabada de lo que está sucediendo.