Evitar la pérdida de calor hace más eficiente la electricidad en el hogar

Consultado por el consumo eléctrico que puede alcanzar una vivienda en San Luis durante el invierno, el gerente de Administración de Contratos de Edesal, Walther Ortega, comentó que “el 70 por ciento de los hogares en la provincia consumen unos 200 Kv/h por mes. En invierno sube un poco, pero no es tan importante, y lo mismo sucede en los meses de verano. El resto del año ese consumo está por debajo de esa cantidad. Si una familia nota que su factura por mes está por encima de ese valor es porque está consumiendo más de lo normal”.

Sobre el consumo de un aire acondicionado, que sería el artefacto más eficiente a la hora de calefaccionar un ambiente, Ortega señaló que “si bien no todos son iguales y hay que ver qué tipo de placa utiliza, en general un equipo de 3.000 frigorías debe tener un motor que no sobrepasa el consumo de 0,4 kilovatios por hora. Y los de tecnología Inverter consumen todavía menos”. Mientras que los paneles y radiadores eléctricos más utilizados y más eficientes son los de 1 y 2 kilowatts.

Entre los consejos que brinda la empresa provincial de energía eléctrica para ahorrar energía y bajar los costos, uno de ellos es: al usar calefacción eléctrica ponerla a una temperatura estable entre los 18 y los 20 grados en el día. Y por la noche, bajar esa temperatura entre los 16 y los 18 grados.

Según explicaron desde el área de Comunicaciones de Edesal, por cada punto por encima de los 20 grados el consumo energético aumenta un 7%, lo que después se ve reflejado en la factura.

Otro detalle a tener en cuenta es que durante el invierno hay que evitar la pérdida de calor colocando burletes en puertas y ventanas. Es importante evitar los “chifletes” en todas las aberturas de la casa para impedir que el calor se pierda y de esa manera ahorrar energía.

En aquellas viviendas donde utilizan un calefón eléctrico lo ideal es enchufarlo para calentar el agua media hora antes de bañarse. Y si no se usará por varias horas, dejarlo desenchufado.

Si fuera un termotanque eléctrico, se recomienda que el termostato se ubique entre los 45° y los 50° C. Y es conveniente eliminar el sarro del interior del tanque.

Si se usa la plancha, no hay que hacerlo para secar la ropa. Se recomienda graduar el termostato del aparato de acuerdo al tipo de tejido que planchará: algodón, seda, lana, etcétera.

También es prudente desconectarla antes de terminar la tarea de planchado y así aprovechar el calor remanente. Es importante comenzar a planchar desde que se la conecta y hacerlo con grandes cantidades. No conviene hacerlo por dos o tres prendas. Y nunca olvidar la plancha enchufada, porque implica pérdida de energía y un peligro, ya que puede ocasionar un accidente doméstico.