Rechazo a la venta de la Casa de San Luis en Buenos Aires

La ONG Manada Solidaria busca juntar firmas para generar un plebiscito de cara a la venta de la Casa de San Luis en Buenos Aires. Considera que el Palacio Lagomarsino es un patrimonio de todos los puntanos, del que el gobernador Claudio Poggi no puede deshacerse.

“Me gustaría hacerle tres preguntas personalmente: ¿Por qué quiere vender? ¿Quién lo va a comprar? ¿Qué se va a construir? Este impresentable viene a hacer una diferencia de la manera más desacertada, en la cual quiere terminar vendiendo el patrimonio de la provincia, que lo van a comprar por el pancho y la coca. Alguien le tiene que poner un freno”, lamentó Fernando Teixido, referente de la organización.

Laura Cuffini, exdirectora de la institución, opinó sobre el valor inmaterial de la Casa de San Luis. 

"Sirvió para la prosperidad"

El intento del cordobés Claudio Poggi por vender la Casa de San Luis en Buenos Aires no deja de sumar repudios y desacreditaciones. Esta vez, el exgobernador y expresidente Adolfo Rodríguez Saá fustigó contra la operación.

De acuerdo a lo que señaló, entre los años 1983 y 1985, empezó una profunda transformación en la provincia, impulsada, principalmente, por la promoción industrial. San Luis venía de estar último en las estadísticas frente a las provincias argentinas y necesitaba encender las inversiones. La Rioja —explicó Adolfo— lo hacía con mucha prensa a favor, al igual que Catamarca. San Luis tenía una Casa en Buenos Aires muy precaria en la calle Bernardo de Irigoyen, una especie de local comercial con 4 pequeñas oficinas al fondo, intrascendente.

“Empezamos a buscar y se nos presentó la oportunidad de esta joya arquitectónica”, aseguró. "Estaba recién refaccionada, en perfectas condiciones; era un lujo. Decidimos hacer la inversión para poder atender principalmente a los inversores; luego, se fue ampliando a otras funciones como la cultura, el deporte, la promoción turística”, recordó. Por supuesto, no faltaba la atención social de los puntanos que llegaban con una necesidad a Buenos Aires: eran atendidos “con enorme eficiencia y corazón”.

“La ecuación económica fue muy buena, compramos en 340 mil dólares y vendimos la vieja Casa de San Luis en 180 mil; con una pequeña diferencia pasamos de un piso de un local comercial a un palacio emblemático y lujoso que permitía deslumbrar al inversor, quien, con su primera impresión y la buena atención, ya decidía invertir en San Luis. Sirvió para la prosperidad de San Luis, debe seguir sirviendo para la prosperidad, el progreso y el bienestar del pueblo de San Luis, por eso me opongo a la venta”, aseveró en un audio que se hizo viral.

Votación popular

Según explicó Fernando Teixido, los interesados podrán dibujar las leyes que quieran para terminar concretando su cometido, pero no pueden dibujar la decisión de los puntanos. De ahí la necesidad de la ONG de conseguir la votación popular. “Para llevar a cabo el plebiscito necesitamos el 1% del padrón electoral. Son alrededor de 4.221 firmas, estimativamente. A eso no le pueden decir que no. No pueden dibujar lo que la gente quiere. Ya quedó demostrado con el Centro Oncológico Integral”, apuntó.

“Este personaje no puede hacer lo que quiera con la provincia; está errado. Está convencido de que es dueño de la provincia y es un simple administrador, es empleado de cada uno de nosotros, no es un semidios. Como empleado, nos tiene que dar explicaciones de quién va a comprar y qué se va a hacer. Según él, hay que arreglar el Policlínico de Villa Mercedes (…) ¿Mañana va a decir que quiere vender la plaza Pringles porque se le cayó el revoque de la oficina? No estaría bien asesorado”, opinó.

Teixido remarcó que juntará las firmas en la calle. Solo precisará firma, aclaración y documento de identidad de quienes quieran dejar su aval.