Acindar no frena, pero suspende empleados

La empresa ArcelorMittal Acindar, que tiene sede en Villa Mercedes, anunció el freno de sus actividades por segunda vez en lo que va del año por una caída en las ventas. La Unión Obrera Metalúrgica (UOM), sindicato que representa a sus trabajadores, aseguró que en la ciudad no frenarán las actividades, pero sí harán un plan de suspensiones durante tres semanas que afectará alrededor de setenta operarios en total de los ciento veinte que tienen. 

 

Víctor Gómez, secretario general de la UOM en Mercedes, explicó que tomarán esta medida para evitar que las plantas paren y, sobre todo, para mantener los puestos de trabajo de sus empleados.

 

Las suspensiones abarcarán las dos últimas semanas de julio y la primera de agosto. “Lo vamos a hacer de esa manera porque tiene menor impacto”, expresó Gómez y agregó que las plantas afectadas serán las que fabrican mallas comunes y clavos. La única que trabajará con todos sus operarios de forma continua será la que realiza mallas especiales.

 

Arreglaron que, durante el receso, los afectados percibirán el ochenta y tres por ciento de su sueldo.

 

Los trabajadores ya vivieron esta situación en marzo, pero por menos tiempo. La medida nacional de frenar la obra pública los perjudicó considerablemente, ya que la firma siderúrgica se dedica a fabricar materiales para la construcción de edificios, rutas y otro tipo de estructuras similares.

 

“El mayor consumidor de los productos de Acindar es la obra pública y también, un poco, las empresas privadas como los corralones, pero no en su mayoría. Por eso, al no tener tantas ventas, se cayó la demanda y la firma tuvo que ajustarse”, expresó el secretario.

 

En la planta principal que está ubicada en Villa Constitución, Santa Fe, el período de freno de actividades será más prolongado porque es donde producen toda la materia prima. “Nos afecta a todos porque para lo que hacemos en Mercedes necesitamos lo que fabrican en Villa Constitución”, indicó.

 

El esquema de suspensiones busca, principalmente, mantener los puestos de trabajo de los empleados fijos de las plantas. Cuando comenzó la caída de ventas a principios de 2024, si bien no hubo despidos, no renovaron los contratos a quienes se les finalizó y, además, realizaron un plan de retiro voluntario para quienes estaban cerca de la edad jubilatoria.

 

“Todo esto no es grato ni para nosotros en el sindicato ni para los trabajadores, pero es la única manera que tenemos ante la falta de producción. Queremos evitar despidos porque creemos que eso es lo más importante”, sostuvo Gómez.