Después de las llamas, la desolación
La tradicional gomería que fue afectada por el fuego, quedó en ruinas. La familia Urquiza, con mucho dolor pero con gran entereza, no baja los brazos y busca "reconstruirse". El trabajo y la solidaridad, son los ejes que mantienen la esperanza frente al terrible hecho.
Todo el Valle del Conlara conoció la gomería de Raúl Urquiza e hijos. Se trata de un emprendimiento familiar con más de 50 años de historia en Naschel. El local, ubicado en las inmediaciones de la Terminal de Ómnibus, fue un faro de asistencia tanto para los propios vecinos que requirieron en algún momento los servicios de la empresa, como para los viajeros que encontraron en la familia Urquiza la ayuda clave para seguir camino. Trabajo y solidaridad, son los valores que emprendieron desde siempre mediante su entrega. Este martes, un fuerte incendio afectó seriamente las instalaciones del taller. Toda la localidad está conmovida.
Después del trabajo intenso de los Bomberos Voluntarios, después de las llamas, quedó la desolación. Importantes daños se registraron, tanto en equipamiento como en aspectos edilicios. La familia, prácticamente lo perdió todo. Con mucho dolor pero también con gran entereza, miran hacia el futuro con la esperanza de "reconstruirse".
"Se perdió todo lo material y ahora todo lo que es estructura; corre riesgo de derrumbe. Para evitar más tragedias, se tomó la decisión más difícil. Ahora vemos la forma de empezar de nuevo, mi padre siempre nos enseñó a trabajar, es muy triste. Él me va a dar la fuerza para seguir y levantar a la familia, estamos todos destruidos. Más allá de lo material es la historia, lo que él nos había dejado", manifestó Tamara, hija de Urquiza, en diálogo con FM Alta Naschel.
La mujer, notablemente angustiada, con su ropa tiznada por el hollín, subrayó que su papá siempre les enseñó la empatía. Más allá de lo que significaba el trabajo de la gomería, les recalcaba que, por ejemplo, "no hay horarios para los auxilios", destacando la clave de la ayuda que implicaba el servicio para la gente.
Quizá lo único bueno de todo lo que pasó, es que nadie resultó herido. Pero ese es un detalle que se difumina en medio del dolor que implica perderlo todo.
"Estamos esperando los resultados de la pericia para saber qué causó el fuego. Sea lo que sea, hay que volver. Cuesta decir 'seguir adelante', pero no pienso bajar los brazos tampoco. Este es un emprendimiento que quedó para toda la familia", manifestó.
Diferentes informaciones locales graficaron que lo único que se salvó, fueron algunos neumáticos nuevos que por lo general ponen afuera del local para exhibirlos al público. Pero lo más importante a nivel material fue literalmente arrasado por las llamas.
Ahora, la comunidad de Naschel está atenta para asistir a la familia Urquiza en todo lo que necesitan. Muchos piensan en ayudar con mano de obra para "levantar" de nuevo el local, otros aportarán su grano de arena como puedan. Lo cierto, es que la gente de Naschel está "al pie del cañón" para apoyar a la familia Urquiza. De las malas, se sale "todos juntos".
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