Momentos de pánico: cuatro personas quedaron atrapadas en el ascensor de la EDIRO

Ante el tumulto de decenas de personas que pasaban por la EDIRO este miércoles, se dio un hecho grave que pudo haber terminado en tragedia. Cuatro personas quedaron varadas en el ascensor, ante la sorpresa de la gente. Una alarma sonaba intermitentemente alertando por la situación y el personal de la terminal impartía instrucciones vía telefónica: "Se paró el ascensor", decían insistentemente a modo de pedido de ayuda.

Mientras tanto, en el elevador, se vivieron varios minutos de pánico y angustia. Una mujer con discapacidad visual junto a dos mujeres jóvenes y un hombre de unos 60 años, fueron "rehenes" de las impericias por la falta de mantenimiento. "Hacían señas desesperados", dijo una vecina de la ciudad que presenció el drama.

Pero lo peculiar no terminó allí. Cuando finalmente lograron bajar el ascensor, "se fue" directamente hasta el subsuelo, volvió a subir y en ese tramo "se trabó nuevamente". Luego de algunos instantes, pudieron rescatar a las personas.

 
El caso es apenas la punta del iceberg. Cualquiera que pase periódicamente por la EDIRO, puede constatar que las escaleras mecánicas, por ejemplo, no están en pleno funcionamiento. Y al mismo tiempo, el ascensor, muestra cierto desgaste mecánico por el uso. La pregunta está latente: ¿Cómo es el mantenimiento de las instalaciones?

Los adultos mayores que tienen dificultades para caminar o las personas con algún tipo de discapacidad, necesitan que estas estructuras estén óptimas para poder acceder a los servicios de la terminal, pero lejos de ello tienen que sufrir las peripecias de la indiferencia. 

"Yo le pido a mi nieta que me busque los pasajes porque no puedo subir las escaleras y el ascensor es un peligro. Es una lástima que pase esto", dijo Elisa Ceballos, una pasajera que estaba a punto de abordar un micro interurbano, en diálogo con El Diario de la República.