Murió un caballo "muy querido" en Terrazas del Portezuelo: ¿Anemia equina o desidia?
Se trata de "El Cotillón", un animal que se ganó el cariño de todos los que frecuentan las caballerizas. Hay múltiples interrogantes sobre lo que pasó. Por ahora, no hay aclaraciones oficiales.
La pérdida de un animal siempre es una experiencia extremadamente dolorosa. Especialmente cuando se crean vínculos que sobrepasan los límites del corazón. "El Cotillón", era un caballo que se había ganado el cariño de los que frecuentan las caballerizas de Terrazas del Portezuelo. Todos lo adoraban. En cada jornada, el equino daba muestras puras de amor, lealtad y cercanía. Pero por razones que aún no están claras, murió.
El deceso despertó múltiples interrogantes, en el marco de una situación sanitaria que había despertado la alarma frente a un caso de anemia infecciosa equina (AIE). Justamente, en los últimos días, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), confirmó un contagio y apuntó que se aplicó el protocolo correspondiente de rigor, que incluyó la interdicción del predio, aislamiento del positivo, bloqueo de ingresos y egresos y verificación del estado sanitario de los equinos presentes en el lugar.
Aunque los primeros análisis realizados sobre el resto de los animales dieron negativos, las autoridades señalaron que se efectuarán nuevos muestreos serológicos a fin de continuar con la investigación epidemiológica. Ahora bien, la muerte de "El Cotillón" ¿Se habrá dado como consecuencia de la AIE?
Por ahora no hay ningún dato oficial que confirme la situación. Pero si fuese lo contrario ¿Cuál sería la causa del fallecimiento? No pocas fuentes advierten que podría tratarse de "desidia" frente a la "mala alimentación" por distintas disposiciones actuales del Gobierno provincial.
En ese caso, el escenario sería aún más grave y se deberían trazar respuestas puntuales, detallando precisamente las cadenas de responsabilidades.
De una u otra manera, la realidad es que la partida de "El Cotillón" dejó un dolor muy grande. La gente que lo conoció, espera acciones concretas sobre los hechos. En medio de un silencio que aturde, resuena -y resonará- el "relincho" eterno del animalito.


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