Por estos días el Club Deportivo La Ribera vive un clima caliente. Un grupo de unos 30 padres pide cambios en la comisión directiva que está a cargo de una sola familia ya que, dicen, no hubo avances en la institución. Por su parte, el presidente del club pionero en esa zona defiende su gestión y asegura que accionará legalmente contra sus detractores.
Acusan al presidente de tomar decisiones unipersonales.
El sábado por la tarde unos 30 padres se reunieron en las incipientes instalaciones del club que tiene 5 años y medio de vida. “Pedimos que se vaya el presidente o que acceda a que lo acompañe una comisión. Desde hace mucho tiempo no hay avances, el club está como paralizado. La comisión directiva está formada por la madre, la esposa, y todos parientes del presidente”, aseguró Claudio Lorca, que desde hace más de cuatro años lleva a sus hijos a las clases de fútbol.
Entre los reclamos está la imposibilidad de jugar los partidos en su propia cancha, ya que las áreas de servicios necesarios tienen falencias. “Pagamos 60 pesos de cuota para que nuestros chicos se diviertan, pero no tenemos un baño digno, lo que hay es un foco de infección. Es insólito pero preferimos que los chicos vayan al campo abierto a hacer pis y no a ese baño”, contó Daniel Pacheco, otro padre.
En la lista de reclamos, las familias señalan la falta de planificación a futuro y dicen que no conocen al resto de los miembros de la comisión directiva de manera personal.
“El presidente dice que la gente rompe lo que él hizo pero en realidad uno ve que las obras que empezó nunca fueron terminadas, o las hizo mal como los baños separados de los vestuarios, eso sucede porque no hay un proyecto de club. El baño está en medio de la cancha y el vestuario en la punta de un arco, no se entiende”, señaló Luis Reguera, padre de otro de los niños que acuden al club.
El grupo de padres indicó que hasta hace algún tiempo se desarrollaban reuniones con el presidente, pero que la gente dejó de ir ya que en los encuentros la mayoría resolvía una situación y luego la dirigencia hacía otra cosa.
“Queremos que haya un cambio en las decisiones, que haya representación de los distintos padres de las categorías. No queremos más decisiones unipersonales, sino que sean tomadas por una auténtica comisión representativa”, indicó Lorca.
La otra versión
Javier Suárez es el presidente y fundador del club que hoy posee un predio de 6 hectáreas y contiene a 13 categorías de fútbol (desde la 2008 hasta la tercera).
“Son sólo dos o tres categorías que están planteando el conflicto, pero acá es una cuestión de egos. Ahora resulta ser que ellos quieren tomar posesión del club de manera arbitraria, van al club sin permiso prenden las luces, no pagan las cuotas, hacen oídos sordos de lo que les dice la comisión”, dijo Suárez.
Reconoció que cuando impulsó el proyecto del club junto a su esposa, no había nadie que quisiera apoyarlos y por ello conformó una comisión directiva con sus familiares directos. Eso sucedió hace más de cinco años.
“Hemos logrado un montón de cosas con nuestro proyecto, luego de golpear muchas puertas. Tenemos un predio propio y este año logramos estar federados. En su momento cuando invitamos gente para que nos acompañara nadie quiso dedicarle tiempo y ahora que la ven más bonita quieren tomar parte”, dijo el presidente que recibió otros 15 mil pesos de aporte para adquirir indumentaria el último viernes.
En cuanto a las obras inconclusas señaló que “no están terminadas porque la misma gente de la zona las rompió o las robó. Nosotros hemos logrado mucho con el apoyo del gobierno provincial, ellos nos dan los subsidios, si no hubiéramos cumplido no nos habrían dado más nada”.
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