La ministra de Seguridad de la Nación, Cecilia Rodríguez, y el secretario del área, Sergio Berni, evitaron ayer responder sobre los problemas vinculados con la seguridad ciudadana, justificaron la ausencia de estadísticas criminalísticas, cargaron culpas a las provincias y a la Justicia.
La ministra Rodríguez se limitó a destacar los operativos Centinela, Escudo Norte y Cinturón Sur.
Ambos funcionarios sólo se prendieron en la polémica con los legisladores opositores sobre la eficacia del sistema de radares para la lucha contra el narcotráfico, en su visita al Congreso de la Nación.
Tras el informe que brindó junto a la ministra en la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Órganos y Actividades de Seguridad Interior, que preside el senador nacional puntano Adolfo Rodríguez Saá, Berni escapó a profundizar el debate sobre el reciente informe de la Procuración General de la Suprema Corte bonaerense que alertó sobre un aumento del delito (un robo cada 135 segundos en 2013), aunque admitió que "son datos del Poder Judicial que no se pueden obviar", en uno de los pocos momentos que respondió sobre temas vinculados a la seguridad ciudadana.
A la hora de responder sobre la falta de información y estadísticas en el área, uno de los principales reclamos de los legisladores de la oposición, el secretario de Seguridad nacional descargó las culpas en los gobiernos provinciales: "No aportan la información al sistema".
El secretario, la cara visible del Gobierno en cuanto a Seguridad ante la pasiva actitud de la ministra (ayer leyó gran parte de su discurso, lo que causó extrañeza hasta en los mismos legisladores del Frente para la Victoria), subrayó que las fuerzas de seguridad son "auxiliares de la Justicia" y pidieron "herramientas judiciales más dinámicas" para combatir el delito, sobre todo en lo que respecta a las órdenes de allanamiento.
Berni prefirió concentrar su discurso sobre el tema del narcotráfico en su primera visita a la Bicameral, constituida recientemente pese a que su creación estaba prevista en la Ley de Seguridad Interior, sancionada en 1991.
Aseguró que el tráfico de estupefacientes "es un tema que no sólo están en la agenda del gobierno nacional, sino de todo el país", polemizó sobre la eficacia del sistema de radares para luchar contra el narcotráfico e informó que en el país "tenemos relevadas 500 pistas clandestinas (de aterrizaje)".
Frente a este punto el senador radical Gerardo Morales le hizo notar que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, indicó en marzo en el Senado que no había pistas clandestinas en el país, a lo que instó a "ponerse de acuerdo; no puede haber dos discursos en el mismo gobierno".
La Bicameral sesionó ayer por primera vez desde su conformación el 9 de abril pasado. La integran ocho senadores y ocho diputados.
Por la Cámara alta están Rodríguez Saá del Interbloque Federal; Miguel Ángel Pichetto, Rosana Bertone, Rodolfo Urtubey y Marcelo Guinle del Frente para la Victoria; el socialista Rubén Giustiniani y los radicales Gerardo Morales y Ernesto Sanz.
Por Diputados están Gilberto Alegre, del Frente Renovador (reemplazó ayer a Sergio Massa); los oficialistas Carlos Kunkel, Gastón Harispe, María del Carmen Bianchi, Claudia Giacone y Nora Bedano; y los radicales Mario Negri y Ricardo Buryaile.
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