La conductora de un auto que volcó ayer en la autopista 55 le comentó a los policías que el accidente había ocurrido cuando, sin querer, mordió la banquina. Perdió el control del vehículo, que dio dos tumbos y se desplazó hacia el cantero central, donde terminó su recorrido.
El derrape ocurrió cerca de las 15 a la altura del kilómetro 784, en inmediaciones de la estancia “El Quebrachal”, referenció el auxiliar Daniel Sosa, de la Subcomisaría 7ª de Juan Llerena, que trabaja en las actuaciones.
El policía precisó que su jefe, el oficial principal Norberto Salinas, les avisó del accidente y fueron a constatar. Los agentes encontraron un Renault Megane gris y a la pareja que iba en él.
Nilda Aidé Brito, de 71 años, conducía. El auxiliar dijo que ella y su esposo, Roberto Hugo Piliocampi, de 70 años, llevaban puestos los cinturones de seguridad. Por eso, estimaron, no salieron despedidos cuando el rodado empezó a dar vueltas.
Ellos tienen domicilio en Jorge Newbery 2498, en José C. Paz, Buenos Aires. “Iban hacia el norte, de donde viven a Villa Dolores”, informó el auxiliar.
Refirió que a la hora del accidente, la carpeta asfáltica estaba húmeda, porque había llovido, y que, aunque estaba nublado, había buena visibilidad.
“La señora sólo dijo que había pisado la banquina, pero no contó nada más ni le preguntamos, por ejemplo, a qué velocidad venía, porque estaba muy nerviosa”, explicó. La Policía les tomará declaración cuando estén en condiciones.
El rodado quedó parado sobre sus ruedas, pero en sentido opuesto al que venía. Luego, el Renault fue trasladado y depositado en el destacamento de El Morro, hasta que sea reclamado por los dueños o familiares de éstos.
Dos ambulancias –una de la localidad de La Toma y otra de la ciudad de Villa Mercedes– trasladaron a los esposos al Policlínico “Juan Domingo Perón”. Según Sosa, no tenían heridas graves, sólo habían quedado con escoriaciones.
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