Merlo: son intransitables algunas veredas de la Avenida del Sol

“No todo lo que brilla es oro", dice el refrán que podría aplicarse a la Avenida del Sol. Porque la pintoresca y atractiva arteria comercial presenta un pequeño, pero problema al fin: el estado de las veredas, denunciado por los turistas y los comerciantes que critican la falta de inversión de sus vecinos.
Es por ello que la Municipalidad de Merlo comenzará a intimar a los frentistas que no las tengan en condiciones, ya que por ordenanza las veredas son "privadas y de uso público".
"Las calles han mejorado muchísimo, pero falta lo otro. Porque los turistas se quejan, porque caminan mucho más por esta zona. Además pensemos que fuera de temporada recibimos en su gran mayoría a los adultos mayores, con problemas de vista, en los pies, y necesitan pasear sin problemas. Entonces si a eso se le agregan algunas de tierra u otras con pozos, estamos complicados. Gracias a Dios no pasó ninguna desgracia, pero se tendría que mejorar eso. El resto está muy bien”, opinó Silvia Perna, encargada de un local de alfajores.
De la misma manera, Alberto Chacur explicó que en su quiosco las principales quejas que escucha también apuntan al estado de las veredas. “Muchas madres incluso no pueden ir y venir tranquilas con los cochecitos porque en muchos casos están intransitables. Y es verdad que hay muchos comercios que están en obra, pero por lo menos podrían hacerle un alisado”, contó el dueño de un quiosco nuevo, quien en octubre del año pasado conoció la villa, se enamoró y vendió todo en Buenos Aires para mudarse a Merlo.
Carina Calagiones es otra inversora, quien después de construir un complejo de cabañas decidió doblar la apuesta y levantó un moderno restaurante que ya contemplaba en el presupuesto la renovación completa del frente.
“Cuando empezamos la obra sabíamos que también íbamos a tener que invertir en la vereda. Y es muy necesario porque hace a la estética del lugar. El problema son los lotes de al lado que pasan a convertirse en baldíos y nadie intima a los dueños para que los limpien. Entonces si nadie les dice nada, queda siempre igual, o peor”, explicó Calagiones, y concluyó: “Lo que más se comenta entre los turistas es que acá no se puede caminar con tacos. Es imposible, por la falta de mantenimiento, los pozos y desniveles”, agregó la empresaria.
En poco más de una semana, el Municipio saldrá a la calle con notas para que los propietarios informen qué plazo necesitan para arreglarlas.
“Luego llegará la etapa de intimación, por carta-documento, porque la idea es que para la temporada de verano todas las de la Avenida del Sol estén en condiciones. Mientras que en los barrios, donde quizás hay menos recursos, vamos a lanzar algún plan especial”, anunció la intendente Gloria Petrino.
Como requisito básico, la nueva vereda tendrá que tener como mínimo un contrapiso de cemento de más de 1,60 metro de ancho. “Esto también tiene que ver con la accesibilidad, por ejemplo, con las sillas de ruedas”, completó.