El gobernador de Salta, el kirchnerista Juan Manuel Urtubey, llamó ayer a no ocultar el hecho de que hay pobres en la Argentina para poder solucionar el problema, a contramano de la visión del Poder Ejecutivo nacional.
Consultado sobre los dichos del futbolista Carlos Tevez, muy criticado por el kirchnerismo por asegurar que "la pobreza en Formosa es muy grande", pidió reconocer el drama que, según la Universidad Católica Argentina, afecta al 28,7% de la población del país.
"Tenemos pobreza en la Argentina; a mi juicio, desconocerlo nos inhabilita para seguir resolviendo, como lo veníamos haciendo, muchísimos de los problemas vinculados a la pobreza", aseguró. "El último Censo 2010 nos plantea que hay un 10% de hogares con necesidades básicas insatisfechas".
Urtubey advirtió que en el norte, la cantidad de hogares pobres es mayor aún. "En el NEA, donde hizo las declaraciones Carlitos Tevez, es el 17%, y en el NOA el 15%. Acá somos 50% más pobres que el promedio de Argentina, y en el NEA un 70% más pobre que en el promedio nacional; ésa es la situación real que tenemos".
Urtubey también analizó, en diálogo con Radio Mitre, el panorama electoral actual. Y allí apareció otra sorpresa: cuestionó la idea de que un hipotético gobierno de Daniel Scioli permita reeditar lo vivido en la década del setenta, con Héctor Cámpora en el gobierno y Juan Perón en el poder. "La conducción del proceso político la tiene quien tiene la responsabilidad; no existe más el famoso cuento de 'Cámpora al gobierno, Perón al poder', una antigüedad, que además no funcionó".
Urtubey puso en duda además la "legitimidad de origen" de su par electo en Tucumán, Juan Manzur, tras las polémicas elecciones en ese distrito. "Fue lamentable todo lo sucedido Manzur va a tener que remarla de abajo para trabajar una legitimación de origen muy fuerte, que de hecho la tiene en los votos, pero con este escándalo".
Si bien afirmó que "la gente requiere respuestas más modernas frente a procesos electorales", y elogió la boleta electrónica usada en su provincia, dijo que es una "barbaridad" cambiar el sistema para los comicios de octubre.
"El proceso electoral ya está disparado; esto requiere de un tiempo. En Salta nos llevó seis años hacerlo. En medio de un proceso electoral es prácticamente y técnicamente imposible", advirtió.
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