Policías de la División Homicidios detuvieron este lunes por la noche a un joven de apellido Perez, que sería el presunto asesino de su tío, Javier Eduardo Guzzetta, el hombre que fue apuñalado durante la noche de navidad en una casa de la calle España y murió horas después en la sala de Terapia Intensiva del Hospital.
Desde que Norma Yaquelina Guzzetta se autoincriminó como la autora del asesinato de su hermano Javier Eduardo Guzzetta, los policías sintieron que estaba cubriendo a alguien y trabajaron con mucha celeridad para reconstruir la historia de aquella noche paso a paso y con todos los detalles.
Norma contaba con dos elementos que podían ayudar en su plan de cubrir a su hijo: primero un golpe en el rostro que le dio supuestamente su hermano durante la pelea, y segundo manchas de sangre de su hermano en su rostro, pero el relato de dos testigos, principalmente el de la pareja de su hermano le jugaban en contra.
Por eso ayer, los investigadores de la División Homicidios trabajaban contrarreloj, por varias razones. Por un lado, tenían las horas contadas para entregar el sumario a la jueza Penal 3 de San Luis, Virginia Palacios. Por otro, al cierre de la edición, preveían solicitarle a la magistrado la orden para detener al presunto autor de la estocada mortal.
Un pedido de ese tipo debe fundamentarse sólidamente. Por ello la premura para reconstruir lo más minuciosamente posible no sólo qué sucedió en el domicilio de la imputada, sino también quienes estaban allí cuando se desató el problema.
Pérez fue citado a la División Delitos, los policías lo buscaron en su casa, lo llevaron sin oponer resistencia y una vez en el edificio lo notificaron y detuvieron. Hoy declara su madre frente a la jueza Virginia Palacios.
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