La histórica imagen refleja el trascendental encuentro. El papa Francisco saludó, este viernes en La Habana, entre besos y abrazos al patriarca ruso Kirill. Es la primera cita entre los líderes del Cristianismo de Occidente y Oriente, desde el milenario cisma.
"Finalmente nos encontramos. Somos hermanos", dijo Francisco al encontrar al patriarca ruso. "Está claro que este encuentro es la voluntad de Dios", agregó.
Los líderes religiosos se mostraron muy cordiales antes de sentarse a charlar ante los destellos y el ruido de las cámaras.
El Papa aterrizó en la capital de Cuba para la trascendental cita con Kirill (69 años), quien llegó un día a La Habana.
Francisco estará en la ciudad cubana unas tres horas antes de seguir rumbo a un México, país azotado por la violencia del narcotráfico, donde realizará su duodécimo viaje apostólico.
El Sumo Pontífice fue recibido por el presidente Raúl Castro, un ateo comunista de 84 años, quien oficia como anfitrión y facilitador de este histórico acercamiento dentro del mundo cristiano.
Los líderes religiosos representan a unos 1.330 millones de cristianos, entre católicos (la gran mayoría) y ortodoxos rusos. Su cumbre reviste un carácter único por ser el primero entre los representantes de las dos mayores alas del cristianismo desde la fractura de 1054.
AFP-NA
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