Preceptor golpeado: el agresor dice que hostigaban a su hijo

Mientras que cada vez tiene más reproducciones el video que registró el brutal ataque de un padre hacia un preceptor, el agresor decidió hablar mediante un intermediario. Para dar su versión sobre lo sucedido eligió al abogado que lo representa y, luego de los hechos de violencia, denunció en el establecimiento educativo que su hijo era víctima de hostigamiento y persecución por parte del preceptor agredido y también elevó ese reclamo hacia el Ministerio de Educación. Por su parte, desde Supervisión General negaron que existieran denuncias previas y condenaron el ataque que sufrió el docente en plena vía pública.

“Respecto al video, uno desconoce la autenticidad del mismo, no sabemos donde fue tomado, quién lo presentó. Lo que sucedió entre los mayores lo vamos a dirimir en la Justicia, nos vamos a ajustar a derecho y a dirimir judicialmente”, es lo primero que dice Javier Quiroga, el representante legal de Enrique Luna, padre de un alumno de segundo año de la Escuela Nº 176, “Maestra Nélida Esther Pérez de Ferrer”.

En su charla con El Diario, el defensor prefirió no ahondar sobre ese ataque a golpes y en cambio buscó establecer una situación previa a ese hecho. Mostró una Carta Documento y una nota enviada a la Supervisión General de Educación, todas posteriores al 13 de mayo -la fecha en la que el preceptor Carlos Domínguez Martini denunció la golpiza-, donde aseguran que el alumno era víctima de una persecución. “El menor viene desde principio de año siendo víctima de persecuciones y hostigamiento por parte del preceptor. Los padres lo empiezan a notar porque su hijo antes ponía el despertador sólo para levantarse e ir con entusiasmo al colegio, y de golpe empezó a hacerse el dormido, a decir que no quería ir, le cambió un poco el humor, hacía constantemente dibujos con un corazón y el texto ‘mamá te amo’”, expresó Quiroga. “Los padres empezaron a preocuparse y hablaron con el chico, quien les contó que Domínguez, que no es el preceptor de su curso, les dice en el recreo o en los pasillos ‘Luna dejá de correr’ cuando el chico no corre,  le decía al resto de los alumnos que no se juntaran con él porque es mal compañero, y hasta fue a una clase de Tecnología y le dijo a la profesora que Luna era un mal alumno y que no tenía las carpetas completas de las otras materias”, explicó.

El abogado aseguró que Domínguez solía decirle que él “tenía el poder de sancionarlo o de hasta expulsarlo”. También el letrado manifestó que había un antecedente del preceptor con otra hija del señor Luna, una joven que egresó el año pasado del mismo colegio y con la que hubo alguna diferencia o “mal entendido”.

Cinco días después de la golpiza que capturó la cámara de seguridad de un supermercado, frente a la vivienda del preceptor, el abogado y los padres del chico fueron hasta el colegio a hablar con el director. Allí, según el representante legal del padre, dejaron expresado en un acta todas estas situaciones de “hostigamiento” y un día después enviaron una carta documento pidiendo “medidas preventivas” para que su hijo no siga sufriendo lo que denunciaban.

“El chico incluso contó que un día habló con una psicóloga y una profesora de lengua sobre el tema. Luego en el cuaderno de comunicaciones informaron a la familia sobre un turno con el Centro Técnico de Apoyo al Aprendizaje, y después suspendieron el turno. Esto no termina acá, vamos a ver también qué determina y qué resulta del examen psicológico del muchacho que hará por una profesional contratada; aparte, se verá la conducta del padre, si se justifica o no se justifica el accionar que tuvo”, señaló el letrado.