Villa Mercedes: vecinos de la avenida Mitre piden la clausura de una brasería

Un grupo de vecinos que reside cerca de una brasería piden la clausura inmediata del local. Las razones: suciedad, malos olores y ruidos molestos. El comercio funciona en la avenida Mitre 989 (paradójicamente a pocos metros del Municipio). Aseguran que deben lidiar constantemente con el humo y el hollín que irradia el pequeño comercio. Además, según los denunciantes, no cuenta con habilitación para el rubro.

Las quejas comenzaron hace unos veinte días. Cansados de la humareda, los residentes decidieron juntar firmas para solicitarle al Municipio que “cierre las puertas” de la brasería. Nélida Figueroa es una de las vecinas más afectadas, ya que vive al lado, en la esquina de Maipú y Mitre. Su hogar es uno de los edificios considerados patrimonio histórico. “Donde funciona el negocio es un lugar chico, que no tiene más de treinta metros cuadrados, no cuenta con patio ni con un sistema abierto para que se vaya el humo y todo va a parar a mi casa. El hollín está dañando severamente el frente de mi vivienda. Yo suelo ponerle un material para que se conserve tal como está, pero así es imposible”, dijo.

Al igual que Nélida, los propietarios de las viviendas contiguas, sostienen que la falta de higiene es una de las principales molestias. “Las veredas están llenas  de grasa porque al no tener patio descargan todo en la calle. Lo mismo pasa con las bolsas de comida, se suelen juntar perros y rompen todo. Y no es menor que a veces saquen mesas y le den de comer a la gente en la vereda. En verano no se puede estar", dijo Liliana Redondo, una de las más indignadas.

Al malestar por la ausencia de la  limpieza, le suman “los ruidos que hacen por la noche. Mi habitación da con la parte de atrás de la brasería. A la madrugada se escucha cómo prenden motores, no sé que será. Ni hablar de los cadetes, se suben a la vereda con la moto y no dejan pasar a nadie, encima son como seis. Y lo peor es el olor, tengo que desinfectar la casa todo el día”, según Estela Gutiérrez.

Para los vecinos, la mayor irregularidad de esta parrilla es que “no cuenta con el permiso para funcionar. Nosotros presentamos varias quejas, fuimos al Tribunal de Contralor, a la UCIM (Unidad de Control e Inspección Municipal) y hasta el Tribunal de Faltas pero nunca obtuvimos respuestas”, indicó la propietaria del patrimonio histórico.

A mediados de la semana pasada, el grupo se reunió con el intendente para contarle su preocupación. “Le presentamos toda la documentación que juntamos, denuncias, las firmas de los vecinos. Todas las pruebas necesarias para que lo cierren. Por lo que percibimos el intendente dijo que iban a encontrar la solución, incluso había funcionarios que reconocieron que no tenía permiso el negocio", contó Figuerola.