Avanzan las gestiones para traer refugiados sirios a la provincia

San Luis avanza con las gestiones para traer refugiados sirios. El diputado nacional, Luis Lusquiños, se reunió esta semana con funcionarios del Ministerio del Interior y de la Jefatura de Gabinete de la Nación para coordinar una "Hoja de Ruta". El funcionario fue en representación del gobierno provincial, la Fundación de Investigación Social Argentino Latinoamericana (Fisal) y la Fundación Quántica. San Luis se convierte así en la primera provincia que avala el proyecto que existe a nivel nacional ("Programa especial de visado humanitario para extranjeros afectados por el conflicto de la República Árabe Siria") para radicar a familias de la nación de Medio Oriente, desgarrada por  una cruenta guerra civil. 

"Hace un año y medio (Fisal), Fundación Quántica, el Centro de Investigación, Desarrollo e Innovación (CIDI) y la Sociedad Sirio Libanesa hicieron un relevamiento de familias puntanas que voluntariamente quisieran alojar refugiados sirios", recordó Lusquiños. Aseguró que "unas 40 familias manifestaron la voluntad de ayudar de diferentes maneras. Unas con alojamiento, otras brindando trabajo. Incluso ofreciéndose a adoptar niños huérfanos, algo muy difícil y que excede los límites del Programa Siria". El funcionario destacó el "enorme espíritu solidario de la gente de San Luis, el compromiso del Gobierno que encabeza Alberto Rodríguez Saá de ayudar a estas familias, y del gobierno nacional, que ya asumió la responsabilidad de alojar hasta 3.000 personas".

Lusquiños dijo que  las autoridades del Estado nacional conformaron una "Mesa siria" que apunta a la identificación de familias de esa nación que quieran radicarse en la Argentina. "Eso lo realizan organismos internacionales como la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). Hay filtros de varios servicios de inteligencia de Europa y Estados Unidos, para evitar el ingreso de terroristas. Superadas estas medidas de seguridad, el gobierno nacional hace su intervención con el Estado provincial y las familias de acogida", explicó Lusquiños y aclaró que "no es el Gobierno de San Luis quien trae a los refugiados, sino las familias de acogida. Los Estados ayudan".

Señalaron que el 29 de agosto autoridades nacionales vendrán a San Luis a dar una charla informativa para los puntanos anotados en el registro. Les brindarán los detalles en los que se avanzaron, los pasos a seguir, saber en profundidad qué están dispuestos a ofrecer y cuántas personas pueden recibir. “De ese modo tendremos un panorama amplio para poder hacer el plan logístico”, confirmó Débora Díaz, encargada del Registro de Familias de Fisal, quien especificó que el apoyo financiero será dado por Estados Unidos, la Unión Europea y  otras organizaciones internacionales. Las familias no recibirán ningún aporte, sólo se presentan de manera voluntaria y solidaria.

Díaz explicó que "el Programa  Siria permite también que inmigrantes de zonas de conflicto, incluso de Irak, Líbano y países lindantes, obtengan un permiso de ingreso al país ante la Dirección Nacional de Migraciones. El programa contempla conceder una residencia temporaria de dos años, que puede ser prorrogada por uno más, y dar un documento nacional de identidad para que puedan circular libremente por Argentina". 

Díaz manifestó que el programa tenía algunos inconvenientes ya que para concretar la inmigración debía existir una “familia llamante” que tuviera al menos un lazo de consanguinidad de grado 4 (ser primos hermanos con el refugiado) o un vínculo de afectividad comprobable. En San Luis no hay familiares con ese grado de parentesco.

Pero en la reunión que mantuvieron los representantes puntanos con las autoridades nacionales recibieron la garantía de que se iba a flexibilizar. "Se va permitir que el Gobierno sea 'llamante', por lo que no necesariamente tiene que ser una familia siria con cierto grado de parentesco quien solicite el traslado", afirmó Díaz.