Sigue en observación la paciente con una prótesis en el maxilar

La paciente que a fines del mes pasado se sometió a una cirugía de máxima complejidad en el Hospital San Luis y de quien sólo trascendió su edad (25 años), continúa en observación constante en el área cuidados intermedios, a partir de la colocación de una prótesis en la parte izquierda de su maxilar, que estaba seriamente comprometida por el avance de un tumor. Además de esa afección física y estética, la falta de obra social fue otro factor que progresivamente generó el aislamiento.

Así lo confirmó el ministro de Salud, Marcelo Riera, quien dijo que la joven, tras su operación a fines de agosto, muestra una evolución favorable dentro de las proyecciones realizadas por el equipo médico dirigido por el especialista de cuello y cabeza, José Luis Peralta, e integrado por más de veinte profesionales de prácticamente todos los servicios del policlínico (Cirugía, Laboratorio, Terapia Intensiva, Guardia Médica, Anestesia y Enfermería, entre otros).

"El curso quirúrgico es el esperable, la complicación que presenta forma parte de las situaciones que son esperables en el contexto de las enfermedades de base propias de la paciente. Pero queremos resaltar el éxito de una cirugía que por la programación y el abordaje, es un hecho inédito en la provincia", sostuvo Riera, quien agregó que clínicamente continúan con la evaluación del comportamiento del sistema endócrino de la mujer, ya que padece hipotiroidismo. Por el momento, no hay certezas de cuándo tendrá el alta debido a que carece de las condiciones necesarias para transitar el control ambulatorio.

Aunque el estado de salud de la joven no es considerado crítico, sí está sometida al cuidado constante durante las 24 horas, porque le hicieron una abertura en la tráquea ("traqueotomía"), para permitir que respire mejor y otra a la altura del abdomen ("gastrostomía"), para facilitar su alimentación directa por el estómago.

"No está habilitada para comer, era lo esperable. Tuvo algunas complicaciones clínicas por la discapacidad que presenta desde su nacimiento, que es un síndrome ligado a los genes, Síndrome de Tackler. Le queda otra cirugía reparadora pero teóricamente ya debería tener una funcionalidad amplia de la mandíbula que después de una rehabilitación le permita comer", explicó la directora del Hospital San Luis, María José Zanglá, quien agregó que la joven está internada hace casi cuatro semanas, mientras que la intervención demandó un total de 9 horas quirúrgicas.

La cirugía empezó con la traqueostomía, que consistió en realizar un orificio en la base del cuello de la paciente, para introducir una cánula por donde se conecta un tubo al respirador artificial. El trabajo continuó con la extirpación del tumor que creció progresivamente hasta provocarle la destrucción de la masa ósea del maxilar, en la zona izquierda.

El trabajo de los médicos se centró en la reconstrucción de esa parte de la mandíbula, a partir una parte de hueso del peroné de la propia paciente, mientras que con la piel de la pierna recrearon el piso de la boca y con el músculo, el relleno. La planificación de la cirugía fue con el desarrollo de un biomodelo con las medidas exactas de la estructura mandibular de la mujer, una pieza que fue diseñada con impresiones tridimensionales (3D).