Los seis trastornos principales del sueño
Además del insomnio, las personas pueden tener problemas respiratorios, pesadillas, sonambulismo e incluso dormir en exceso.
Cristían Gonzalo Mayor, médico psiquiatra dio detalles de los seis principales trastornos del sueño que puede sufrir una persona.
Insomnio
La aparición de los síntomas definitorios de insomnio, guardan una clara relación con un acontecimiento estresante. Puede ser de carácter psicológico, psicosocial, interpersonal o del entorno, por ejemplo conflictos en las relaciones laborales, duelo, el diagnóstico de una enfermedad o el traslado a otra ciudad. “Se habla de insomnio primario cuando una persona manifiesta, durante al menos un mes, dificultad para dormirse (insomnio inicial o de conciliación) o para mantenerse dormido (insomnio medio) o dificultad para volver a dormirse después de haber despertado prematuramente (insomnio tardío o de última hora). Es el trastorno del sueño más frecuente en la población”, dijo Mayor.
Trastornos respiratorios
Existen tres tipos: el síndrome de apnea obstructiva del sueño, el síndrome de apnea central del sueño y el síndrome de hipoventilación alveolar central. El primero de ellos se caracteriza por episodios repetidos de obstrucción de las vías respiratorias superiores (apneas o hipopneas) durante el sueño. “En general, suele producirse en personas con sobrepeso y conduce a un estado de somnolencia excesiva. Los ronquidos implican el paso del aire por vías parcialmente obstruidas y en los períodos de silencio respiratorio se producen las apneas o hipopneas, es decir, el cese de la respiración debido a una obstrucción total de las vías superiores”. El doctor explicó que estas personas suelen ser roncadoras incluso desde la infancia y sus ronquidos acostumbran ser lo suficientemente intensos como para perturbar a los demás.
Alteración de ritmos circadianos
“El ciclo de sueño-vigilia debe coordinar con el ritmo circadiano para poder desarrollar un sueño reparador, estos procesos son alterados por ejemplo en los horarios laborales rotativos, el famosos jet-lag cuando viajamos en diferentes husos horarios, o por adelanto o atraso de los mismos”.
Parasomnias
Mayor dijo que constituyen un conjunto de trastornos que se caracterizan por la existencia de comportamientos o fenómenos fisiológicos anormales que ocurren durante el sueño. Pesadillas, terrores nocturnos y sonambulismo. Detalló que este último hace que la persona se levante de la cama y empiece a andar. Durante estos episodios se produce una disminución del estado de vigilia y de la respuesta a los estímulos. “El sonámbulo tiene la mirada fija y perdida, y muestra una ausencia relativa de repuesta al diálogo. Si consigue despertar durante el episodio, o bien al levantarse por la mañana, no puede recordar lo sucedido con claridad”.
Hipersomnias
Suele tener su inicio entre los 15 y los 30 años y progresa gradualmente, aunque en general se resuelve en la edad adulta. La diagnostican cuando, durante al menos un mes, la persona padece una somnolencia excesiva durante el día o duerme demasiado. “Es importante en la hipersomnia primaria diferenciarlos de los 'grandes dormidores'. Es decir, personas que necesitan un tiempo de sueño superior a la media y no presentan somnolencia diurna excesiva”.
Movimientos anormales
Uno de los más repetitivos es el síndrome de piernas inquietas. Esa necesidad imperiosa e irresistible de mover las extremidades inferiores. Aparecen en la transición vigilia-sueño, cuando el paciente está todavía despierto, dificultando la conciliación del sueño al principio de la noche o tras los despertares nocturnos. También están los calambres nocturnos: contracciones involuntarias de un músculo o grupos musculares de las piernas y el bruxismo, que no es otra cosa que el cierre enérgico de la mandíbula.
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