El año pasado, el 911 recibió y analizó casi 100 mil llamadas

La seguridad de los puntanos no sólo la dan los uniformados en las calles, sino también las más de 200 personas que vigilan lo que pasa a través de 456 cámaras en toda la provincia, pero además, desde setiembre, son quienes atienden el 911, cuando antes lo administraba la Policía. En el Centro de Control de Cámaras (CCC) informaron que durante todo el 2017 recibieron y dieron curso a 97.846 llamados. En relación a 2016, el incremento en la atención de las emergencias fue de un 6%.

Si bien no cuentan con un desglose de las cifras según su origen, en el CCC señalaron que la mayoría de las llamadas recibidas fueron por asuntos de seguridad. Después siguieron en el conteo  las emergencias de salud y las consultas  particulares. 
El responsable del CCC, Ariel Hauría, hizo un balance que estuvo marcado por la incorporación del número de emergencias. "Desde el 13 de setiembre, además de tener el centro de control de cámaras y seguimiento vehicular, sumamos a la administración, la gestión del 911. Al tener esto, garantizamos al policía que se encarga de discernir si la situación amerita alguna acción o no, que tenga la llamada de forma inmediata, y además acompañarle imágenes en vivo de las cámaras si es posible”, destacó.

Hasta agosto habían procesado un promedio de 6.653 llamadas mensuales. En setiembre hubo un salto a  8.925, y desde octubre las cifras están en constante crecimiento, y diciembre tuvo el récord de 12.322 llamadas. 

Hauría indicó los secretos para las mejoras del servicio: “A partir de que incorporamos el 911, cambiamos la configuración y la optimizamos, además de poner los recursos humanos. Duplicamos al 100% la cantidad de operadores disponibles las 24 horas para la atención telefónica. Esto hizo que haya un aumento del 40% en las llamadas atendidas”.

Según el funcionario, esto también se reflejó directamente en la confianza de la sociedad al número de emergencias, algo que se había perdido y lograron recuperar en estos últimos cuatro meses. “Los ciudadanos llaman porque saben que ahora les damos curso a su pedido”, manifestó.

Luego agregó: "Otro logro fue que todas las llamadas de la provincia ingresen al Centro de Emergencias de San Luis, y desde acá las despachamos a través de un sistema a las distintas unidades regionales. Además de San Luis, la otra unidad grande está en Villa Mercedes".

Más allá de estos números, Hauría dijo que aproximadamente un 50% de los llamados que reciben son en broma, o de gente que llama al 911 y corta cuando atiende el operador.