Hilda Laura Martínez, una mujer que late

Su enorme sonrisa y su tranquilidad hacen que los 49 años de Hilda Laura Martínez pasen completamente desapercibidos. La artista plástica, que además está titulada como psicóloga, nació en Córdoba, pero tuvo desde pequeña vinculación con San Luis.

Es más, ella misma dice que es bastante de puntana: "Mi identidad se basa acá. Nací en Córdoba, pero viví parte de mi infancia en Unión y en San Luis. Después volví por poco tiempo a Córdoba y finalicé el secundario en Orán, en Salta”, dijo a modo de resumen.

La vinculación de Hilda con el arte surgió desde muy chica. Su madre es cantante lírica y por ella siempre tuvo un empujón al arte escénico. Por el costado paterno su abuelo estuvo vinculado a la escultura y su tía se dedica a la pintura hasta el día de hoy.

En su primer paso por San Luis, Martínez vivió sus tardes en la Escuela de Bellas Artes. Ahí tuvo sus primeros pasos entre pinceles. “Cuando tuve que elegir qué estudiar, una de las posibilidades era Bellas Artes, pero me incliné por la psicología y retomé el arte en mi vuelta a San Luis”, agregó.

La artista llegó a la Provincia luego de rendir su tesis de psicóloga en 1992. Por esos años se casó, tuvo a sus dos hijos, Federico y Santiago, y combinó su profesión de consultorio con el dictado de clases en la Universidad Nacional de San Luis, hasta que en 2005 decidió dejar la docencia.

“Ahí lo conocí a Lidio Sotomayor en un taller de actualización a la pintura que hice en el BAS XXI. Desde ese momento no me separé más del arte”, agregó otra de las alumnas del prestigioso artista. Dentro de su formación está el dibujo, la pintura, la escultura y el land art, que es arte con arena en el contexto del mar.

“Si yo pudiera elegir me quedaría con mi bastidor de arena, pero todavía no lo pude extrapolar acá, es algo que tengo pendiente”, remarcó Laura que en su última muestra, “Latidos”, pudo exponer parte de su trabajo en la arena. Esta muestra tuvo dos ediciones: la primera fue en el museo Dora Ochoa de Masramón y la segunda en el hall del auditorio Mauricio López.

A esta exposición individual se le suman en su carrera las muestras pictóricas “Fragua” y “Lazos” que además incluyeron esculturas.

También Hilda expuso en numerosas muestras colectivas, una de ellas sucedió en la Casa de San Luis en Buenos Aires, por el Aniversario de la Provincia durante agosto. Expuso además en Córdoba junto a su tía pintora y también fue parte de una exposición organizada por Alberto Rivas tras la puesta en valor del Archivo Histórico que lleva el nombre de José La Vía. “Uno de mis pendientes era mostrar mi trabajo y más aun con amigos y colegas”, dijo.

Martínez también tuvo distintas participaciones en lo literario. Publicó dos poesías en “Gritos del alma: antología de cuento y poesía”, editado por la Municipalidad de San Luis, y participó dos veces en calidad de ilustradora en el libro “Médicos de almas” y en la guía “Warmi”, que edita la Universidad Nacional de Córdoba.

Hoy Hilda vive su vida en plenitud. Combina sin tanta organización sus horas de consultorio con los momentos en su atelier, además de pasar mucho tiempo con sus amigas de la infancia y junto a su familia e integra la asociación “Pircas” que trabaja por la defensa y conservación de la cultura y los recursos naturales.

“Soy una enamorada de estas dos facetas y considero que se integran en mi y se potencian una a la otra. No estoy permanentemente enfocada en una de las dos actividades, las alterno como etapas vitales que son”, concluyó.