Familiares de los detenidos por la Operación Hereford marcharon a Tribunales

“No hay pruebas para que estén ahí adentro. Nuestros abogados dicen lo mismo. Entonces, ¿cómo puede ser que estén en prisión?”, se preguntó Luján Reynoso, esposa del empleado rural Pablo Escudero, encarcelado junto a sus jefes, los productores rurales José Alberto Chiotti padre e hijo y a otros tres involucrados en la Operación Hereford, que destapó una maniobra de robo de ganado mayor a otro productor rural hace unos meses.

Reynoso y otras cien personas, todos familiares, amigos y allegados de los Chiotti, del transportista Luis Alfredo Pereyra y del empleado Benito Nicolás Quinteros, se reunieron esta mañana a la 9 frente a la Iglesia Catedral de la capital para marchar hasta los tribunales puntanos para pedir por la liberación de los imputados.

“Queremos justicia por los detenidos, que son inocentes. Simplemente pedimos que se aplique la ley”. “Se ha cometido una aberración con todas las familias de los detenidos y hoy nos manifestamos para pedir que sean liberados”, acotó Reynoso, que sostenía uno de los tantos carteles con las palabras “justicia” y “libertad”.

Los manifestantes comenzaron a caminar por la peatonal Vía Rivadavia cerca de las 9:30, llegaron minutos después al edificio del Poder Judicial, donde entonaron el himno nacional, y luego dieron vuelta a la Plaza Independencia para apostarse nuevamente frente a tribunales un momento más.

“Somos gente de trabajo. Hemos trabajado toda la vida. Mi marido trabajó toda la vida. Es de San Luis y siempre apostó a San Luis. Por eso esto es algo totalmente injusto. Porque ellos son inocentes”, sumó Marcela Vainotti, esposa de José Alberto Chiotti padre.

“Ellos están desbastados y las familias también. Nos causaron un gran daño moral y psicológico y no tenemos explicación a los que nos está pasando”, se lamentó, y dijo que por el momento esperan que una Cámara resuelva la apelación que los abogados de los imputados presentaron luego de que la jueza de la causa, Virginia Palacios, rechazara un pedido de excarcelación de la defensa.

Los Chiotti, Pereyra, Escudero, Quintero y Gilberto Miranda fueron procesados por el delito de “abigeato agravado en concurso con asociación ilícita”. Las sospechas de Palacios, que luego fundó con pruebas en el procesamiento, es que los productores rurales se habían asociado en forma ilícita con otras personas para robarle hacienda, durante siete años, a un productor vecino, Julio César Vergés en un campo de “Cuatro Esquinas”.