Primera experiencia de Paris en pista cubierta

Leandro Paris, actual campeón sudamericano en 800 metros, arrancó el año con todo. A fines de enero viajó a Madrid (España) y tuvo, por primera vez en pista cubierta, un mes de entrenamiento más dos competiciones. Y el saldo en el invierno europeo fue muy positivo, ya que consiguió la segunda mejor marca histórica argentina “indoor” en la distancia (1'51"14), detrás del récord que tiene Luis Migueles (1’49”00). 

En la capital española, el atleta de El Volcán estuvo junto a otros dos atletas olímpicos: el entrerriano Federico Bruno y la marplatense Belén Casetta bajo las órdenes del entrenador Daniel Díaz. “Paré en el Colegio Mayor Argentino así que estaba con más compatriotas, algo que me hizo la estadía más fácil”, contó Leandro.

—¿Qué balance hacés de esta experiencia?

—Fue una gira de preparación general. Aproveché para competir en pista cubierta de 200 metros, algo que no tenemos acá. Es muy distinto a los 400 metros que estamos acostumbrados porque tiene desniveles en las curvas. Corrí dos carreras. Una prueba control en Madrid y otra muy importante que le dicen ‘meeting’ en Barcelona.

—Hablemos de tu debut "indoor" en Madrid.

—Era como una carrera nacional, en donde los entrenadores toman tiempos, sacan cálculos y conclusiones antes de los 'metting'. Fue muy linda porque me sirvió de experiencia; también difícil porque al ser una pista tan chica, los atletas se cierran muy fácil. Tenés que tener mucha fuerza. Si bien me costó acomodarme, salió un lindo tiempo. En las cuatro vueltas fui progresando y logré algo muy importante: la segunda marca histórica argentina en 800 metros en pista cubierta. 

—¿Notaste la diferencia al correr bajo techo?

—Sí, correr en pista cubierta son unos dos segundos  más que en una pista normal. Además, era la primera prueba del año tras haberme preparado en San Luis. Me encantó y quedé contento sobre todo por la marca.

—Y en Barcelona, en donde hubo más nivel, ¿Cómo te fue?

—Ahí la idea fue buscar el récord argentino pero no se dio porque me confié un poco en las ‘liebres’. Allá se compite siempre con estos atletas que marcan el ritmo y luego se hacen a un lado. Pasó más lento de lo que debía y la carrera no salió como esperaba. Fue una prueba de gran nivel porque allí hubo atletas internacionales, algunos que estarán en el Mundial de Birminghan (2 al 4 de marzo). Correr con ellos me sirve muchísimo.

—Fuera de lo deportivo, ¿Qué te dejó este viaje?

—Es una experiencia más. Soy de fijarme mucho en qué tengo que mejorar, me sirvió para ver cómo entrenan en Europa. Yo miro todo. Los deportistas allá tienen otras posibilidades en todo aspecto. Acá es más complicado, pero uno tiene que pensar en positivo. Poner la mente en blanco y darle al trabajo todos los días. Yo pienso en salir a competir a nivel internacional y sí o sí entrenar en sintético más seguido.

—Ahora se viene el Grand Prix (en Concepción del Uruguay, del 23 al 25 de marzo).

–Sí, va a estar muy bueno y espero hacer una buena marca porque habrá buenos atletas, entre ellos dos brasileños que corren muy fuerte. Luego viene la preparación en Cochabamba (Bolivia), en donde me quedaré para competir en los Juegos Odesur. Después, la idea es volver un mes más a España.