"La reforma previsional es un saqueo a los jubilados"

Susana Arce es la presidente del Centro de Jubilados de la Provincia. Ella vive de cerca la realidad de la tercera edad. Aseguró que a veces los jubilados se acercan para pedirles que los ayuden a pagar la luz. "Se ven afectados por la economía en todos sus aspectos. Su salario siempre está en detrimento con lo que debería ser", sostuvo.

Desde marzo el haber mínimo de un jubilado es de $7.660,42. Tuvo un aumento de más de 5%, unos $400 aproximadamente. "Para poder cubrir las necesidades de salud, que tengan una buena alimentación y pueda obtener sus medicamentos, descontando la parte social, eso dejémoslo de lado por el momento, una persona de la tercera edad debería ganar por encima de los $15.000. Hablamos de las necesidades básicas, sin contemplar un alquiler, por supuesto", manifestó Arce. Un valor muy por debajo del que reciben.

Sucede también que muchas de estas personas necesitan de la ayuda de sus familiares para vivir. "Algunos tienen tratamientos médicos crónicos, por ejemplo personas con diabetes o hipertensión que suelen ser las enfermedades más comunes a esa edad, y no hablemos de afecciones graves como problemas en los riñones y sus consecuentes diálisis que son de un altísimo costo", remarcó.

"Siempre los más afectados en cuestiones económicas son los jubilados. Es muy desproporcionado el aumento que recibieron y no corresponde, es un castigo a la gente grande, que es la más vulnerable. La reforma que preparó el gobierno nacional principalmente fue en contra de los jubilados, es un saqueo. Si no se hubiera hecho estarían cobrando más de $8.000, entonces es nocivo para ellos, porque esta es la etapa donde tendrían que estar gozando de tantos años de haber trabajado", expresó.

Además dijo que los aumentos de impuestos son inhumanos "puede ser que mientras más mayor es la gente, menos les interesan, y tendría que ser al revés, deberían valorarlos más. Todas estas cosas que se hacen en contra de ellos, claramente los afecta, porque es una edad donde los problemas se acentúan, porque la persona no es la misma. Trabajó toda la vida para poder gozar de su jubilación, de estar más tranquilos, poder sobrellevar su salud y darse pequeños gustos".

Agregó que las personas más jóvenes no quieren jubilarse porque ven los efectos negativos de eso. "Las nuevas generaciones no quieren llegar a esta etapa, porque están viendo cómo viven ahora sus abuelos", remarcó.

Para despejarse

Los centros de jubilados reciben cada vez más adeptos. Según Susana Arce, presidenta del Centro de Jubilados de la Provincia, entre el Nacional y el provincial de Villa Mercedes y de San Luis, hay más de 9.000 afiliados.

Arce precisó que en la capital puntana asisten unos 5.000. "En Mercedes tenemos una filial y los socios son de localidades como Justo Daract, Quines, San Francisco, Luján y La Toma", comentó.

"Acá empiezan a relacionarse. Es la oportunidad justa para volver a tener amistades y no sentirse solos", manifestó.

Hugo Ercoreca es el presidente del Centro de Jubilados y Pensionados Nacional. "Nuestro espacio acaba de cumplir 82 años y es el más antiguo del país", exclamó. Este lugar tiene 1.200 socios y pueden practicar yoga, gimnasia para adultos, tejido al crochet, pintura en tela y computación. También organizan viajes dentro y fuera de la provincia. El centro está en Pringles entre Colón y General Paz.

Actividades en el Centro

-El Centro de Jubilados de la Provincia está en 9 de Julio y Colón. Tiene 7.800 socios entre jubilados, pensionados y voluntarios. Su presidente, Susana Arce, contó que la idea es contener psicológica y físicamente a los abuelos, e integrarlos.

-Las actividades que ofrece son gratuitas para la gente de la tercera edad. Los socios voluntarios son jóvenes que participan de las clases, pero con un aporte en dinero.

-Se puede aprender a bailar bachata, salsa y zumba. También computación, inglés, yoga y gimnasia. También dictan talleres para agilizar la memoria, dan turnos para masajes y pedicuría. Además organizan viajes por el país, y los viernes hay "tardes de té", con bandas en vivo y baile.

-Abre de lunes a viernes de 8 a 13 y de 16 a 20.