Condenaron a Julieta Silva a tres años y nueves meses de cárcel

La Justicia de Mendoza condenó a Julieta Silva, que estaba acusada de asesinar a su novio Genaro Fortunato, a tres años y nueve meses de prisión domiciliaria. A pesar de las declaraciones de la mamá del joven, los jueces determinaron que la chica no tuvo intención de matarlo y por eso le dieron una sentencia muy por debajo de la que pedían los fiscales y la familia, que era entre 14 a 20 años de prisión.

Luego de un cuarto intermedio, pasadas las 14:30 del lunes, dieron a conocer la decisión de los jueces mendocinos Rodolfo Luque, Julio Bittar y María Eugenia Laigle. Consideraron, por unanimidad, culpable a la acusada, madre de dos niños. El Tribunal Penal Colegiado Nº 1 de San Rafael, la condenó por "homicidio culposo agravado" y además le prohibieron conducir ningún tipo de vehículo por ocho años.

Si bien Silva no quiso hablar antes del veredicto, sí lo hizo la madre de Genaro, Graciela Linares.  "¿Por qué Julieta? Genaro te quería, tenía proyectos con vos y vos sabés de lo que te estoy hablando. Estaba contento, con ganas de vivir", expresó Linares, quién habló en todo momento directamente a la cara de la acusada, y agregó: "Espero que Dios le dé paz a tu alma".

En ese momento, Silva se quebró en un llanto desconsolado y, a pedido de la defensa, el discurso de la angustiada madre fue interrumpido por el tono personal que había adquirido.

El incidente entre los jóvenes ocurrió a la salida de “La Mona”, un bar bailable de la provincia vecina, hace casi un año. Silva, de 30 años; y Fortunato, de 25, dejaban el lugar en medio de una discusión y, al parecer, él intentó detener la salida intempestiva de su novia colgándose del auto, la mujer giró en "u", lo atropelló y lo mató en el acto.

 NA.