Dos corridas y un homenaje a Ramón Cabrera

El reloj marcaba las 15:30. "El horario de siempre", se escuchó por ahí. Es que todos los días a esa hora Ramón Cabrera esperaba a los corredores para iniciar la rutina de entrenamiento en el Parque de las Naciones.

Y ayer, a un año de su fallecimiento, un gran grupo de atletas volvió a reunirse para homenajearlo con un entrenamiento similar al de siempre, pero no igual. Porque "nada es igual desde su partida", según dijo Claudia Delgado, integrante de la Agrupación Atlética Ramón Cabrera. "Siempre dije que era como un padre para todos. Su ausencia nos causó mucho dolor. Se lo extraña, pero estamos de pie para seguir adelante con la agrupación y su legado", completó.

Mientras que en el sector que lleva su nombre se pintaba una pista de atletismo en el piso, un poco más allá estaban los hijos de Ramón: Dayan y Johan. "Hoy es un día en donde dan vuelta un montón de emociones. Creo que no hay mejor manera de recordarlo que haciendo lo que él amaba", dijo Dayan.

"Mi viejo es un ídolo para nosotros, hizo muchas cosas por el atletismo puntano. Hasta juntó plata para comprarle zapatillas a uno de sus atletas. Estoy orgulloso de él", agregó Johan, quien también destacó el buen recuerdo que dejó en el ambiente: "A donde vamos siempre nos hablan de él de la mejor manera".

Mientras se preparaban para iniciar el trote, tres señoras charlaban y también dejaron sus palabras para recordarlo. "Ramón me enseñó a amar este deporte", dijo Juana Ávila. "Fue un gran entrenador y mejor persona", agregó Guillermina Millapi. "Fue enorme. Ayudaba a todo el mundo con su sencillez, siempre con una palabra de aliento", completó Ana Velázquez.

A pocos metros, estaba Mabel Aguilera, expresidenta de la Agrupación que también quiso recordarlo: "Era un grande y se extraña muchísimo. La nueva comisión  decidió hacer este homenaje en el aniversario de su fallecimiento, siempre con la idea de seguir creciendo como atletas, que es lo que él nos enseñó".

Se infló el globo de largada. Tras una entrada en calor, los integrantes de la agrupación iniciaron un trote por el Corredor Vial Eva Perón para recorrer algunos kilómetros y recordarlo frente al mural que tiene Ramón a la altura del Puente Blanco.

Unos minutos antes, el grupo que integran sus hijos, llamado Hay equipo Ramón, también partió desde el parque, pero con rumbo al cementerio parque Jardín del Recuerdo, ubicado en el sudoeste de la ciudad, en donde yacen los restos de Ramón. "Teníamos un fondo programado y en este día tan especial vamos a ir hasta allá para recordarlo", contó Jésica Barloa.

Ese grupo salió por calle Riobamba al trote, recorrió el Parque IV Centenario y por ruta 146 llegaron hasta el cementerio. Allí se dejaron flores, medallas y un dorsal. Hubo lágrimas, rezos y la sensación de que Ramón Cabrera  estaría sonriendo porque veía a sus atletas haciendo eso que tanto les apasiona: correr.