Casi 300 personas adeudan la cuota alimentaria a sus hijos
Son casos detectados por la Justicia. En San Luis, el 98% de los morosos que integran el Registro es hombre.
Vender bienes de forma rápida y silenciosa es una de las maniobras más comunes que algunos padres intentan antes de llegar a una mediación con su expareja para poder acordar la cuota alimentaria para un hijo o hija, que es obligatoria.
Marcos (nombre de fantasía), de poco más de 45 años, se separó de su esposa en 2015 y al momento de dividir los bienes en común con ella ocultó un gran terreno en un barrio cerrado en las afueras de la ciudad de San Luis. Hoy, en esa extensa porción de tierra construye una imponente vivienda. La historia acredita un procedimiento ilegal habitual y callado que algunos encaran a la hora de acordar la cuota alimentaria para un descendiente.
En San Luis hay casi 300 personas que adeudan la cuota alimentaria a sus hijos, indicó la directora del Registro Provincial de Deudores Alimentarios Morosos, Mary Amaya. El organismo depende del Ministerio de Justicia, Gobierno y Culto.
En su mayoría, el listado está integrado por hombres. Sin embargo, el 2% de la nómina está conformado por mujeres. “Actuamos en consecuencia de los oficios que recibimos de los juzgados de Familia. Somos el intermediario entre la Justicia y el resto de los lugares donde las personas deudoras pueden moverse. Y limitamos a aquellos padres o madres que no cumplen con la obligación de mantener a sus hijos”, destacó la responsable del Registro.
El registro es confidencial y privado y tiene una plataforma digital donde los funcionarios, a partir de oficios emitidos por la Justicia, dan altas a nuevos incumplidores, o bajas en función de que los padres o madres incorporados al listado empiezan a cumplir con su obligación.
"Sé lo que se siente"
Este año solo dos hombres accedieron al certificado de negatividad, que es otorgado cuando la madre o el padre paga la deuda de la cuota alimentaria. “He tenido dos casos de conocidos que se atrevieron a pedirme favores en beneficio de un tercero. Nunca lo hice y en ese sentido soy inflexible. Yo conozco el tema por mi historia personal. Mi madre nos crió sola, sin el apoyo económico de mi padre, y sé lo que se siente, a mí nadie me contó lo que se vive en estas situaciones”, sostuvo Amaya.
Las personas que necesiten información detallada pueden escribir a registrodeudoresmorosossanluis@gmail.com.
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