El Santo Cristo de la Quebrada derramó bendiciones por las calles del pueblo

“Dios conoce nuestros corazones, él sabe de nuestras súplicas”, exclamó el padre Cristian de la parroquia de la Villa de la Quebrada al dar comienzo a una peregrinación muy particular del Santo Cristo en pleno contexto de pandemia. La imagen recorrió las calles del pueblo, primero escoltada por los gauchos y luego a bordo de la autobomba de los Bomberos Voluntarios de la localidad, mientras fieles y vecinos abrían las puertas y ventanas de sus hogares para recibir las bendiciones del Santo Patrono.

Fue “un regalo de Dios”, según las propias palabras del sacerdote, ya que no estaba previsto que el Cristo saliera de la iglesia, pero a último momento y por las necesidades sociales que se viven a causa del coronavirus, las autoridades decidieron que la imagen visitara a los fieles.

El recorrido comenzó poco antes de las 15 como previa a la santa misa, se realizó bajo los protocolos vigentes de distanciamiento social y se solicitó a la población que no se acercara a la imagen.

La posesión reducida partió de la parroquia y llegó hasta el cementerio del pueblo antes de emprender el regreso.

Numerosas manifestaciones cargadas de emoción y devoción marcaron la el encuentro, tras dos años en el que el Santo no salía a las calles.

“Es un día muy especial para toda la comunidad y los fieles del Cristo. Hoy, con distancia física, pero con el corazón más cercano que nunca, le pedimos por la salud de toda la población y porque esta pandemia llegue pronto a su fin", expresó la intendenta, Rosa Calderón.

Derramando bendición a los enfermos vecinos del Pueblo. Don Lucio Alcaráz enfermo de cáncer. Foto: Municipalidad de Villa de la Quebrada.

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