En un año, las conversiones a GNC crecieron más de un 60%

Para aliviar un poco el bolsillo, cada vez son más los puntanos que optan por instalar los tubos de GNC en sus vehículos. Según el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), en el primer semestre de este año en la provincia las colocaciones aumentaron más de un 60 por ciento respecto al mismo período de 2020. Los trabajadores del rubro aseguran que este mes hubo una pequeña desaceleración.

Según el informe del Enargas, durante los primeros seis meses se realizaron 1.106 instalaciones, mientras que en el primer semestre del año pasado fueron 686. Según el propietario del taller ubicado en avenida Perón antes de 25 de Mayo, Jorge Tamagnone, explicó que si bien tuvieron un pico alto de colocaciones, estas últimas semanas tuvieron un parate. “La tendencia es buena, anteriormente veníamos muy bien, pero ahora se frenó un poco. De igual manera siempre tenemos consultas y los clientes vuelven”, dijo Tamagnone, quien resaltó que también hacen muchas reinstalaciones.

Sobre este último punto, destacó que los taxistas son los que más piden este tipo de trabajo, dado que le dan un mayor uso al vehículo. “Ellos cambian la unidad más seguido, por lo que amortizan mucho más rápido los gastos. Ahora no tan solo lo hacemos en autos convencionales, sino también de alta gama”, destacó.

“El ahorro que tienen es muy significativo y por eso al cambiar de auto, también se llevan el equipo. Todavía conviene usarlo a gas”, precisó el dueño del comercio.

La inflación pega fuerte en todos los sectores, por lo que los cilindros también se vieron afectados y sufrieron incrementos. Según el propietario del taller, el equipo de quinta generación, que tiene un cilindro de 65 litros, está arriba de los 100 mil pesos, mientras que antes costaba 87 mil. Por 7 mil pesos menos se consigue el de cuarta generación.

Para atraer a los clientes, a la hora de abonar les regalan una válvula para cargar por fuera. “Siempre buscamos la manera para que los clientes accedan a un equipo nuevo. Si tiene uno que no le sirve para su automóvil, tratamos de aprovecharlo para abaratar los costos. Nos las ingeniamos para mantener las fuentes de trabajo, no podemos pedir más. Hay que seguir para adelante”, acentuó.

Explicó que con el de quinta generación se pueden recorrer 200 kilómetros por 800 pesos, mientras que llenar el tanque de nafta súper sale 4 mil pesos y en promedio se hacen 600 kilómetros. “El ahorro es muy significativo, más allá de los valores, siempre conviene andar a GNC”. 

La misma situación se repite en el local que está ubicado sobre avenida Ejército de los Andes. Su propietario, Rodrigo Marcos, manifestó que el ritmo de colocaciones venía bien, pero que ahora se frenó. Además, precisó que las consultas aumentaron en un 50 por ciento. Sobre el costo del equipo de quinta generación, resaltó que subió un 15 por ciento, por lo que su valor ronda los 70 mil pesos. “La gente está interesada, ya que la nafta no se puede sostener. Al comenzar las clases saben que se van a mover mucho más y les conviene hacer el cambio, dado que por semana gastan entre 2 mil y 3 mil pesos. El ahorro es casi del 70 por ciento”, explicó.

Sobre si es verdad que los cilindros dañan los autos, Marcos explicó que es un mito. “En Italia hace unos 50 años usan el gas natural comprimido, mientras que en Alemania, Estados Unidos y Europa lo hacen por temas ambientales. La Unión Europea sacó una resolución que dice que a partir de 2030 no podrán circular más automóviles a combustión, solamente eléctricos o a GNC”, aclaró. Comentó que una tendencia que se ve mucho es que las fábricas de autos ya los venden con los tubos colocados.

Ricardo Von Euw, encargado del comercio ubicado en avenida Perón entre Justo Daract y Aristóbulo del Valle, resaltó que con la llegada de las vacaciones la gente decidió invertir el dinero en otra cosa, por lo que las conversiones por el momento se mantienen estables. Asimismo, resaltó que el pico más alto se dio en abril. En su comercio los equipos sufrieron incrementos de un 20 por ciento y el equipo de quinta generación cuesta unos 80 mil pesos.