El Centro de Disposición Final recicló 573 toneladas de basura

El Municipio de San Luis sigue con el reciclaje como uno de los ejes de su política medioambiental y prueba de ello es que, en 2021, el Centro de Disposición Final (CDF) recicló 573 toneladas de material seleccionado de los residuos de los vecinos, que fue vendido o reutilizado por el ente comunal. En 2020 apenas habían sido 200 toneladas.

Según detalló la directora del CDF, María de Fátima Cioffi, la Municipalidad recibe 300 toneladas diarias de basura, de las cuales pueden tratar, para su posible reciclaje, entre 30 y 50 toneladas. Cuando los residuos son dirigidos a su enterramiento, recicladores del Municipio abren las bolsas, separan lo reciclable, lo enfardan y lo envían a las empresas que compran el material.

"En esas 573 toneladas que se recuperaron hay aluminio, botellas salseras, cartón, chatarra, cubiertas, hojalata, papel, PET, que son las botellas de gaseosa, polietileno, que es el mixto de los plásticos, tubos de cartón, trapo y vidrio", enumeró Cioffi.

Entre el material recuperado, juntaron 81.874 kilos de botellas tipo PET, equivalentes a 1.637.000 envases. También reunieron 162 mil kilos de cartón y 80 mil kilos de vidrio.

La Comuna contrató a fines del año pasado a 40 trabajadores que hacen tareas de reciclaje. 

 

La Municipalidad suele hacer la oferta de material reciclado una vez que reúne un par de toneladas. Notifica a los interesados y acuerda precios.

Pero también ha establecido distintos convenios para mantener un intercambio constante. Uno de ellos es con una empresa de cemento de Mendoza, a la que destina los neumáticos que hay en el CDF. La fábrica los usa como combustible y ahora se planea un acuerdo para destinar los envases tetrabrik, que no tienen posibilidad de ser reutilizados. El año pasado reciclaron 98 mil kilos de cubiertas.

A su vez, con una empresa con sede en la capital, firmaron un convenio por el que por cada tonelada de polietileno que le entregan, la fábrica la reutiliza y fabrica  16.800 bolsas, que el Municipio luego da de manera gratuita a los vecinos. El año pasado destinaron 55 toneladas a la compañía y a cambio recibieron 924 mil bolsas.

Además del reciclaje, el CDF también obtiene fondos del canon que les cobra a las industrias para destinar allí sus residuos, con la finalidad de enterrarlos. Los interesados deben registrarse en la Secretaría de Medio Ambiente y Parques de la Provincia, que es la autoridad de aplicación. Se emite un certificado que los identifica como generadores de residuos, que presentan al CDF y de allí se procede al enterramiento.

"No podemos recibir residuos peligrosos, aquí enterramos residuos inertes y urbanos. Cuando ingresan con su declaración y destinan los residuos, a fin de mes cobramos el canon por tonelada y certificamos lo que trajeron y así se cierra el cumplimiento a la ley", describió.

Una política municipal

Desde que asumió la gestión del intendente Sergio Tamayo, realizaron múltiples acciones para fomentar el reciclaje entre los vecinos, recordó Cioffi. Entre ellas, pasaron de tener 2 a tener 14 "puntos verdes" para recibir residuos reciclables en forma separada en distintas zonas de la ciudad.

También implementaron el "Ecocanje" en ferias y actividades del Municipio, en el que si los vecinos entregan material reciclable, la Comuna les obsequia bolsas de consorcio y friselina. Y "Ecopromos", por el que alumnos del penúltimo y el último año del secundario compiten por acopiar material reciclable, con premios para lo que más kilos logren juntar. "Se han hecho muchas campañas para incentivar esta política y en 2021 hemos recuperado y reciclado el doble que en 2020. Si seguimos así vamos bien", estimó la directora.

Otro punto a destacar es el mejoramiento de las condiciones laborales de los recicladores que trabajan en la planta del CDF. Cuando llegó la nueva gestión, se enteraron de que cobraban en negro, de acuerdo al material que juntaban en el día. La administración actual les ofreció una ayuda económica (un beneficio social de la Comuna) que aceptó un grupo y en noviembre del año pasado fueron contratados. Son unos 40 empleados que trabajan allí, en separación, clasificación y enfardado del material.