"Umbrales", de Mariana Balliro se expone en Casa Mollo

Para Mariana Balliro, entrar a Casa Mollo significa ponerle un freno y detener el tiempo. La ambientación, decoración y todo lo que rodea al bar ubicado en calle Rivadavia de San Luis capital es emblemático para la artista, quien lo eligió para presentar su muestra "Umbrales".

La pintora, conocida por sus coloridas obras donde retrata diferentes rostros con ojos grandes y miradas profundas que alguna vez se cruzaron por su camino y otros, producto de la imaginación, recopiló los trabajos más importantes de su carrera y los colocó en las paredes del lugar para que los comensales y el público en general puedan disfrutar del arte. La muestra estará disponible hasta el 14 de octubre.

"Por la majestuosidad de sus puertas, por todo lo que se esconde detrás de ellas y por los habitantes que tuvo esa casa en el pasado, decidí presentar mis cuadros de una forma diferente", contó la artista, quien iluminó sus obras con diferentes luces. Es la primera vez que Balliro expone en el bar y los cuadros pertenecen a series pasadas.

"En esta muestra en particular juego con las luces y las sombras del lugar e invito que los interesados también lo hagan con miradas que se pierden en la oscuridad", agregó Balliro, quien en un sector eligió iluminar los cuadros con luz negra.

La idea inicial que le floreció a la pintora fue que las obras de arte dentro del lugar se transformen en un viaje que abrirá las puertas hacia otras dimensiones para el público. "A recuerdos de experiencias pasadas, a intuiciones e imágenes cargadas de emoción y sentimientos".

La artista expresó que "son los umbrales los que transmiten vibraciones que iluminan tanto el mundo exterior como el interior de Casa Mollo, con todas sus cargas emotivas".

Mariana jugó con las luces y los espacios, también con los espejos, las ventanas y las paredes que rodean el bar. "Siento que entrar te transporta al pasado, donde se reúnen diferentes sensaciones", contó la artista, quien tuvo oportunidad de exponer en varios lugares de San Luis y siempre que lo hizo mostró su lado más profundo.

Redacción/MGE