Abusó de una amiguita de su hijo y ahora pide una pena en suspenso

Este miércoles, en la Sala Oral 2, la fiscal de Juicio, Virginia Palacios Gonella, y los defensores de Pablo Chamorro, Pascual Celdrán y Emanuel Olagaray, presentaron un acuerdo de juicio abreviado para que al hombre, acusado por haber abusado de una amiga de su hijo, se le imponga una pena de tres años en suspenso por el delito de abuso sexual agravado por la inmadurez sexual de la víctima.

El arreglo presentado ante el tribunal, compuesto por Hugo Saá Petrino, Fernando Julio de Viana y Adriana Karina Lucero Alfonso, cuenta con la aprobación de la víctima y de su representante legal, quien denunció los hechos en octubre de 2018. El acusado, quien llegó al debate libre, aceptó ser autor penalmente responsable de los hechos que se le endilgan.

Según la acusación fiscal, durante el período comprendido entre enero de 2017 y septiembre de 2018, se produjeron situaciones de abuso sexual por parte de Pablo Chamorro contra R.R.S., quien entonces tenía apenas 13 años. La mayoría de los abusos ocurrieron en un domicilio de la localidad de Quines, donde el imputado vivía con su familia. Además, hubo otras situaciones que ocurrieron en la casa de la víctima.

Los abusos se facilitaron debido a la frecuencia de las visitas entre el imputado, los padres de la víctima y el hijo del imputado, debido a la amistad preexistente entre las familias. Inicialmente la adolescente consintió las relaciones sexuales y otros actos de contenido sexual debido a su inexperiencia y a la relación de amistad que existía entre las familias, demostró la investigación.

La madre de la víctima se enteró de los abusos debido a un cambio en el comportamiento de su hija, lo que la llevó a indagar sobre lo que estaba sucediendo. La adolescente finalmente le reveló lo ocurrido en octubre de 2018. La mujer presentó una denuncia en la comisaría local y luego en el Juzgado, ratificando los hechos y mencionando la relación cercana entre las dos familias.

Además de los testimonios de la víctima y de la madre, un informe psicológico respalda la credibilidad del relato de la adolescente y también un informe médico, que confirmó signos de acceso carnal. Chamorro tenía 28 años al momento en que ocurrieron los hechos.

Ahora, solo resta que el tribunal homologue el acuerdo, pero Chamorro seguirá en libertad ya que la pena solicitada es en suspenso.

Piden 8 años de cárcel por abusar de su hija y su nieta

El de ayer (miércoles) no fue el único caso de abuso tratado en los Tribunales esta semana. El martes, Palacios Gonella solicitó ante los jueces de la Cámara Penal 1 Residual que las causas que se llevan contra un hombre acusado de abuso sexual concluyan bajo el procedimiento de juicio abreviado. El acuerdo contó con la conformidad del imputado, quien fue asistido por el defensor de Juicio 1, Esteban Sala.

El hombre de 68 años está imputado por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo y abuso sexual simple agravado por el vínculo. Las víctimas fueron su hija y su nieta. Por ambos hechos, la fiscalía solicitó una condena de ocho años de prisión domiciliaria.

Frente al presidente del tribunal, José Luis Flores, el acusado admitió su culpabilidad, reconoció su autoría y aceptó la calificación penal impuesta y el monto de pena solicitado

Palacios Gonella explicó que el acusado padece enfermedades e intervenciones quirúrgicas que “deterioran su salud progresivamente”. Por ello pidió que la pena sea bajo régimen domiciliario. “El imputado requiere permanente asistencia para tareas de la vida cotidiana que exigen mayor esfuerzo, motivo por el cual uno de sus médicos le ha indicado que debe permanecer en reposo y con tratamiento médico, a lo que se le agrega la edad del imputado”.

Lo expresado por Palacios contó con la adhesión de Sala y de la defensora oficial de Niñez, Adolescencia e Incapaces, Marcela Torres Cappiello, quien representó a la segunda víctima, la nieta, que aún es menor de edad.

Luego de escuchar a las partes, el juez Flores pasó la causa a resolver y en los próximos días el tribunal dará a conocer si homologa o no el acuerdo.

Mientras tanto, el imputado continuará con prisión preventiva en su domicilio, ubicado en la zona este de la ciudad, que no podrá abandonar salvo por cuestiones de salud justificadas.