Los aumentos de precios en los kioscos son de al menos el 40%

La galopante inflación no da tregua y el comercio local sufre los vaivenes de la economía. Uno de los tantos rubros alcanzados es el de los kioscos, que en el último mes registraron actualizaciones de al menos el 40%. Si bien muchos de los artículos que disponen no son de primera necesidad, conforman el consumo diario de miles de familias, con lo cual reviste una importancia clave.

Para conocer los pormenores del sector, El Diario de la República concretó un recorrido entre calles Mitre, Balcarce, Colón y Junín, segmento donde preponderan este tipo de comercios. Si bien cada caso tiene su particularidad, la realidad es que el ajuste es unánime.

“La mayoría marcó un 40%. Algunos subieron abruptamente. En lo que es aguas, por ejemplo, en una semana aumentaron el 10%. La gaseosa más conocida tuvo un aumento antes de la ola de actualizaciones y se bancó todo ese ruido, pero el jueves ya subió de nuevo. Una botella descartable (de 2 litros) está por los $2 mil”, contó Carlos Torranzo, quien atiende un local céntrico.

No pocos kiosqueros advierten que algunos distribuidores se aprovechan del escenario y cobran los productos con precios cuestionables, independientemente de la debacle financiera. Hay casos en los que un jugo bajó de una semana a otra $500. Y no tiene relación con una mejora económica, sino que queda en evidencia la especulación.

“El problema no es diciembre, donde dentro de todo las ventas se han mantenido. La cuestión va a ser enero, esa es la gran incógnita”, referenció Roberto Quiroga, empleado de un negocio.

Para dar una idea de precios, dos caramelos gomitas cuestan $100. En un vuelto de $50, en el mejor de los casos dan 2 minicaramelos de menta. Si el kiosquero es conocido, a veces puede sacar un puñado al azar con ventaja para el cliente, pero no es moneda corriente.

Una gaseosa de medio litro de primera marca ronda los $750 y los $800. El agua mineral de medio litro se consigue entre los $500 y $900, según las marcas. Un chocolate de 38 gramos de primera calidad toca los $700. En lo que refiere a cigarrillos, un atado de 10 de primera marca va entre los $800 y $900, mientras que un atado de 20 está en un promedio de $1.600. Un alfajor triple no baja de $700 y un paquete de gomitas llega a los $800. En definitiva, con el billete de mayor denominación se puede comprar poco y nada en un kiosco.

En un local de calle Pringles, al momento del relevamiento uno de los encargados estaba remarcando precios con una pistola etiquetadora. Mientras actualizaba las listas, detalló que desde noviembre han cambiado los montos una vez por semana. Según los artículos, han variado entre el 10% y el 21% cada remarque. En ese drugstore calculan el aumento del último mes en un 50%.

En lo que refiere a cigarrillos, el panorama difiere al resto de los artículos debido a los cálculos que se hacen por cada retoque de precios, aunque las escalas trepan con picos de más del 20%. Sin embargo, en este caso puntual, las ventas no merman.

“En los primeros días de diciembre la gaseosa llegó al 40%. Lo que se ve es que la gente no se queja. Pero es fuerte; hay cosas que estaban en $800 la semana pasada y ahora las tengo en $1.300”, indicó Federico, empleado de un kiosco de la ciudad.

En líneas generales, en los locales no se ve todavía un impacto en las ventas, aunque hay otros casos que sí: “La gente mermó el consumo. Desde principios de noviembre y fines de diciembre, veo subas que llegan tranquilamente al 60%. La gaseosa trepó el 40%. El promedio es similar en todos los productos. Es increíble”, lamentó Santiago, quien atiende un kiosco por calle Junín.

Redacción/ALG