Al ritmo de las murgas, miles de vecinos disfrutaron los carnavales

El parque La Pedrera se llenó de brillos, plumas y colores por dos noches, y miles de vecinos disfrutaron de los carnavales al ritmo de los tambores. Más de quince comparsas lucieron los trajes que prepararon con esfuerzo para el evento y cautivaron al público con las y los pasistas que recorrieron a lo largo el sambódromo.

En ambas noches, pasadas las 21:30 dieron apertura al paso de las murgas. Al llegar al escenario, cada uno tuvo cinco minutos cronometrados para mostrar alguna coreografía y cautivar al público. En la primera velada, al finalizar su paso, cada una recibió un reconocimiento por su participación y esfuerzo previo.

Una de las más aplaudidas fue Pibes de la Diversión, a la que las y los presentes no dudaron en cantarle el feliz cumpleaños por el aniversario de sus 20 años de trayectoria.

“Somos del barrio Tres Esquinas, tenemos cien integrantes y vinimos para festejar, así que pasamos con toda la furia. Están los chicos que tocan y pequeños y adultos que bailan; volvimos a hacer los trajes originales con los colores verde y blanco, que fue la indumentaria con la que inició todo. Es algo muy emotivo, lo

disfrutamos mucho”, manifestó Vanesa Pereyra, una de las bailarinas.

Silvana Diep, integrante de Reina Materazu, comentó que es la primera vez que participa en los carnavales. “Me encantó esta oportunidad porque siempre estuve como encerrada y con esto salgo de la rutina de siempre. Nos preparamos por casi un mes, el vestido me lo hice todo yo, con mis manos; tiene mucha tela, plumas, tachas y una faja, todo tratando de reciclar los materiales”, aseguró la mujer.

Por otro lado, Roxana García, de Los Fantásticos Murgueros, contó que prepararon para mostrar la temática de Argentina para recordar el triunfo del Mundial de fútbol. “Le pusimos todas las ganas para que todo salga lo mejor posible, pero para divertirnos, sobre todo”, señaló.

Los carros de comida rápida y los artesanos también tuvieron su espacio en el predio. Ofrecieron una variedad de productos para que los vecinos pudiesen disfrutar de las noches con comida y hasta se vayan con un recuerdo de la ciudad.

“Somos de La Ribera y formamos parte de las ferias que organiza el Municipio, así que a todos los lugares donde nos invitan, vamos. Haber podido estar acá es una posibilidad para que nos conociera más gente y para disfrutar el carnaval”, comentó Sheila Hafford, una emprendedora.

En ambas noches, estuvo el paso de los autos maniáticos que llegaron desde Buenos Aires, que cautivaron al público con rodados que demostraron destrezas con giros y quedando en dos ruedas. El cierre de ambas jornadas fue a pura cumbia y cuarteto. La primera, con La Zabrosona y la segunda, con Trulalá.

Redacción / NTV