El “balance” puntano: 50% maíz y 50% soja

Por las condiciones del suelo y las climatológicas, en la provincia de San Luis el comportamiento de los productores con respecto a los cultivos es distinto a lo que ocurre en la zona núcleo (Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba) y, por efecto de ‘la chicharrita’, en provincias del norte.

Al desglosar las diferentes realidades que se dan, el ingeniero Ramiro Goncalvez precisó: “Hay dos datos que siempre trato de recalcar para contextualizar la charla”. El primero es que San Luis es el 1% de la superficie sembrada dentro del panorama nacional. El segundo: es que acumula entre 500 mil y 600 mil hectáreas. Somos el 1% del padrón y el 1% en agricultura. Entonces, acá no tenemos mucha influencia de la zona núcleo, es decir que no somos netamente agrícolas. Lo hacemos en función de un sistema mixto, agrícola/ganadero”.

Seguidamente añadió: “Que quiero decir con esto. Que la situación agrícola de San Luis está acomodada en las necesidades. Entonces, si en el país hay un 70% soja y 30% maíz, en San Luis es distinto: 50% soja y 50% maíz. Esto es porque la soja necesita más ambiente para producir, mejor calidad de suelos; y, San Luis, por ser una zona arenosa (semiárido) no tenemos esas condiciones”.

Los productores puntanos apuestan fuerte por el maíz “al ser un cultivo más estable en cuanto a rendimiento, aguanta el calor, el granizo, es decir es un cultivo más rústico”, destacó.

En su hábitat. El ingeniero Ramiro Goncalvez y un colaborador en la supervisión de hectáreas de soja.  Foto: Gentileza. 

En alerta por la “chicharrita del maíz”

En el norte argentino, por los daños que ocasionó el insecto, acobardó a muchos productores  (en especial los del Chaco, Salta y Santiago del Estero) que decidieron pasarse a la soja. Otro factor que influyó en esta determinación es que para cosechar maíz también subieron los costos por el uso de fertilizantes. Por eso creció un poco la zona con soja en todo el país.

En San Luis, si bien hay una alerta permanente ante cualquier aparición del insecto que transmite enfermedades, el ingeniero Goncalvez precisó que “la tensión ha bajado y en eso ayudó cómo respondió el INTA, los organismos provinciales y los privados. Aunaron esfuerzos y se ocuparon en la instalación de trampas para monitoreo”. “A medida que suban las temperaturas esto va a ir cambiando, pero se sigue monitoreando. Todavía no se ha llegado a los umbrales para controlar”, especificó y agregó: “Hay una escala de 1 al 10, cuando llega a 6 o 7 y larga la larva a nivel nacional o en cada zona hay que controlar que los umbrales estén por debajo de ese control”.

La chicharrita ocasiona problemas en la fisiología y desarrollo de la planta del maíz (achaparramiento), que puede reducir el rendimiento del cultivo en un 50%. En la temporada pasada la plaga se expandió desde el norte argentino hasta la zona núcleo.

Precios

En cuanto a los precios de la soja y del maíz, los principales cultivos que se dan en San Luis, el experto puntano comentó que para seguir la evolución de los mercados económicos habitualmente sigue los análisis y datos que aportan Enrique Erize (de la consultora Novitas SA) que es una voz permanente- mente de La Nación y de diferentes medios, a Pablo Adreani que es columnista de Clarín y a Salvador Di Stefano.

Erize dice que hay que tener en cuenta tres puntos con respecto a la soja.

1- Estados Unidos ha tenido una cosecha récord, entonces están sobrestockeados.

2- Brasil alcanzó la producción de Estados Unidos. Con buenas cosechas pasó a ser potencia.

3- A nivel macro, señala que no hay que olvidar que el aceite que más se consume en el mundo es de palma, en vez de la soja que es lo que producimos nosotros. El 80% de la soja de la argentina se va en aceite.

“Entonces, al estar sobre stockeados Estados Unidos y Brasil,  y el rinde del aceite de palma que es bueno, hizo que el precio de la soja  baje. A esto hay que agregar que el brote de chicharrita hizo que se bajen las hectáreas de maíz, que se vayan a soja;  todo eso hizo que se deprimiera el precio. Por eso Enrique Erize estima que en abril-ma- yo llegará hasta 270 dólares, de 300 dólares que hace dos meses costaba. Evidentemente, no es bueno el panorama para soja”, dijo.

“En cuanto a maíz, -añadió- si bien Estados Unidos tuvo una buena cosecha, por diferentes medidas tiene que cubrir un cupo de etanol, por ello exportan muy poco maíz, es decir que lo consumen casi todo”, afirmó.

Como Brasil no se quedó atrás y también tuvo buena cosecha de maíz “al disminuir la superficie de maíz en Argentina, en teoría hará que el precio aumente. Hasta el momento se ha sostenido, pero irá aumentado levemente, sobre todo por estos factores. En enero siempre hay un quiebre del precio de la zona núcleo (norte de Buenos Aires, sur de Santa Fe y este de Córdoba). Hasta ahora el precio del maíz está estable en 185 mil pesos, aunque esta tendencia depende de un evento de sequía”, puntualizó.

A no bajar la guardia con las malezas

En el cierre del diálogo con el ingeniero agrónomo se detuvo a aconsejar en tratar de ser lo más prolijo posible en el control de malezas, lo que influye en el rinde de los cultivos. “Para evitar que la maleza consuma el agua que puede generar un efecto adverso en los cultivos de girasol, soja y maíz, no hay que perderle pisada”, completó.