Juntan firmas para pedir que el Banco Nación no sea privatizado

Aunque el tratamiento de la ley ómnibus por ahora quedó en suspenso, los trabajadores del Banco Nación no piensan quedarse de brazos cruzados mientras avizoran nuevos embates e intentos para privatizar el organismo. Comenzaron una campaña para juntar firmas que rechacen la medida, para enviarlas luego al Congreso.

La iniciativa fue impulsada a nivel nacional por la Asociación Bancaria y será replicada por la delegación mercedina, que se encargará de hacerla llegar también a distintos puntos del sur de San Luis.

"Debido a la insistencia del presidente Javier Milei de conseguir la privatización, en nuestra provincia vamos a ir pueblo por pueblo, casa por casa, tratando de concientizar sobre la importancia del banco y los beneficios que se perderían si deja de ser estatal", manifestó el secretario general del sindicato, Claudio Nazario.

Remarcó la posibilidad de acceder a créditos a tasas subsidiadas, contar con programas financieros accesibles para las pymes, a la gran cantidad de sucursales y cajeros que están dispersos por los diferentes puntos del país, incluso en las localidades, municipios y parajes más pequeños, entre otros.

"Hay que tener algo en claro también. En 2023, el Nación dio ganancias, que fueron depositadas en el Tesoro Nacional. A diferencia de otras empresas privadas, que se llevan el capital hacia el exterior. Es rentable y por eso es un negocio tan tentador para algún empresario que quiera comprarlo", aseguró Nazario.

Ayer por la mañana, recibieron en la sede local una serie de libros encuadernados con tapa azul, que reafirman el lema que vienen pronunciando los empleados desde que se hicieron públicas las intenciones del gobierno nacional: "El banco no se vende; la Patria no se vende".

Además de contar con uno en cada sucursal, se encargarán de hacer llegar esos ejemplares a los barrios de la ciudad, para que los vecinos puedan manifestar su intención y custodiar un organismo que es patrimonio del Estado argentino. Luego, reunirán todos los libros foliados en todas las provincias para llevarlos a la Cámara de Diputados para la apertura de sesiones del 1º de marzo.

"En los 90 ya pasó esto y toda la ciudadanía se manifestó con más de un millón de firmas", recordó el sindicalista.

El secretario general también sostuvo que los empleados que recorran domicilios lo harán identificados con sus uniformes, para darle mayor transparencia a la campaña. Para seguridad de los vecinos, aclaró que no es necesario que dejen pasar a nadie a sus hogares para asentar su apoyo en los cuadernos.

Esta no es la primera iniciativa que los trabajadores del Banco Nación realizan para oponerse a una posible privatización. A finales de diciembre, los empleados llevaron a cabo un abrazo simbólico en el frente del edificio ubicado sobre la calle Pedernera y Fuerte Constitucional, que es el principal sustento laboral de unas setenta familias de Villa Mercedes.

Sin la ley, siguen los intentos

Después de perder el "primer round" en el tratamiento de la ley “Bases”, también conocida como ómnibus, el Gobierno sigue con los asaltos para lograr su cometido y privatizar una gran cantidad de organismos estatales.

Al principio había un listado de 41 empresas públicas que podrían pasar a capitales privados. "Con las negociaciones se bajaron a 37 y en 3 de ellas se quería vender el 50%", repasó Nazario.

Como hubo un rechazo de los bloques opositores y la normativa volvió a foja cero, Federico Sturzenegger instruyó al Directorio del Banco Nación a convertir el banco en una Sociedad Anónima y después vender acciones.

Redacción/MGE