La inflación del humo: subieron las marcas "económicas" de cigarrillos

La crisis económica golpea todos los órdenes, las tabacaleras no quedan exentas. Y aunque parezca un tema irrelevante frente a otros tópicos de consumo, los cigarrillos encuadran un esquema clave en las fluctuaciones inflacionarias.

Por un lado, por lo que implica la producción en sí misma, y por otro, lo que conforma a las ventas en los minoristas. Ahora las marcas más “económicas” treparon en el orden del 30%.

“Yo creo que ya no hay nada barato, fumar es un presupuesto importante, sobre todo para los que lo hacen a diario. Acá en el local hay quejas, pero la gente compra igual”, reconoció Ignacio, empleado de una despensa céntrica.

El incremento reciente, obedece a la firma British American Tobacco Argentina. Lo hizo para seguir la estrategia de su competidor principal, con el objetivo de no generar un desfasaje significativo de la presión de subas. Las actualizaciones dan de lleno en marcas como Rothmans y Lucky Strike, que son más baratas. También impacta en Camel, cuyos precios suelen estar por encima de las descriptas.

“La última vez que subieron fue en diciembre. No tengo el valor específico, pero fue en más del 20%”, indicó Gerardo, quien atiende un kiosco por calle San Martín. 

Para graficar, Rothmans marcó números significativos. En su alternativa “XC Convertible Box 20”, pasó de $1.180 a $1.420. En sus otras variables, los montos van desde los $495 (cigarrillos SC 20) hasta los $1.490 (XL 43/70 Box 20).

En Lucky Strike, la variante Red Box 20 quedó en $1.780 y el Original Red Box 20 en $1.240.

En Camel, la alternativa Box 20 quedó en $1.970. La opción más barata es el KS 20, por $1.770.

A su vez, la marca Winston se mantiene en $1.770. Cabe remarcar que los parámetros pueden presentar variaciones según los comercios.

Aunque no hay un impacto muy significativo en las ventas puntanas, lo cierto es que en algunos casos cambian las formas de compra y consumo.

► En primera persona

Andrea, una vecina de la zona centro, es fumadora desde hace 8 años. Aseguró que nunca le resultó tan complicado “mantener el vicio” como ahora. “Ya no se puede ni fumar tranquila. En mi caso, a veces compro tabaco para armar y lo voy alternando, a veces compro cigarrillos sueltos, pero ya superan los $100, no conviene. Lo que sí mantengo es que cambié de marca, voy por algo intermedio. Estaba gastando unos $30 mil por mes, más o menos”, expresó.

Federico, un joven del interior que se encontraba fumando en la plaza Pringles, dijo que las subas lo obligan a dejar de fumar paulatinamente. “No es mi decisión puramente personal, pero aprovecho el panorama para dejar de a poco. Ahora estoy comprando un atado de 10 cada 3 o 4 días”, señaló.

De acuerdo a los especialistas en el sector, este último aumento no es el único en la industria, pero se destaca por la tendencia creciente de los costos asociados al hábito de fumar.

“Yo soy un fumador social. Consumo cuando salgo con amigos. Pero aún así, a pesar de fumar poco, es un gasto que trato de evitar últimamente”, compartió Gustavo, vecino de la zona sur.